“Hay ancianos a los que han sacado hasta 100.000 euros”
Una anciana denunció a la editorial y a la financiera que le estafaron 15.000 euros y ganó en los tribunales. Entrevista a Sánchez y Resina, socio director de 'Hispajuris'
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Un anciano mirando por la ventana de su casa (Getty Images)
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Madrid
El juzgado de primera instancia número 4 de Santander dio la razón recientemente a la anciana que denunció a una editorial y la financiera que estaban detrás de un crédito oculto que ella desconocía. En el pasado SER Consumidor entrevistamos a Ángel Sánchez y Resina, socio director de Hispajuris.
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Ángel Sánchez y Resina, abogado: “Hay ancianos a los que han sacado hasta 100.000 euros”
El abogado, que conoce muchos casos similares, consiguió la nulidad de los dos contratos que le habían hecho firmar a esta mujer, tanto el de venta de libros como el de financiación: “Les venden generalmente libros, pero también todo tipo de consumibles: colchones, aspiradoras… Siempre les llevan un regalo, como un teléfono móvil. Investigan gente mayor que vive sola, se ganan su confianza y, al final, ellos les firman lo que sea”. Se da la circunstancia que, en general, “la familia no sabe nada: solo cuando va a visitarla ve la acumulación de libros que tiene, miran la cuenta del banco y se dan cuenta de que tres financieras o cuatro le están cobrando”.
"¿Las financieras son cómplices necesarios de ese fraude?", preguntamos en el programa. Sánchez y Resina fue claro: “Sí. En el momento en el que la empresa que vende el producto, pasa el contrato a la financiera. La financiera les paga, pero también se lleva mucho dinero. Si el contrato por unos libros que en realidad valen unos 300 euros asciende a un total de 3.000, 500 son para la editorial y 2500 para la financiera. Son contratos de adhesión, con documentos ininteligibles”.
El abogado también aclaró que “desde el punto de vista jurídico, existe error en el consentimiento: estas personas no saben nunca lo que firman, primero por sus circunstancias personales (la edad, sus enfermedades) y, porque en el fondo, les están engañando. No les explican lo que van a comprar, tampoco que les van a abrir un contrato de financiación. Después, les extorsionan: les llaman diciendo que no han pagado, pero que les perdonan una cuota si les firman otros contratos. Hay gente a la que le han sacado en 4 años 100.000 euros”.