62 días en la cumbre del Aconcagua
Acento Robinson se desplaza a Jaca para hablar con distintas figuras del alpinismo como Fernando Garrido, que acampó durante 62 días en la cumbre del Aconcagua, a 7.000 metros de altura
Acento Robinson: Jaca, capital de la montaña (17/12/2017)
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Jaca
En un Acento Robinson especial desde Jaca, hablamos con Fernando Garrido, que acampó durante 62 días en la cumbre del Aconcagua, a 7.000 metros de altura. Esta hazaña supuso el récord mundial de permanencia en solitario en altura. "Al estar tanto tiempo ahí arriba, la cabeza te empieza a jugar malas pasadas. Llegué a pensar que había alguien más que me acompañaba."
Aragonés de 59 años, en su época de juventud, allá por mediados de los ochenta, tuvo la increíble idea de establecer un récord de permanencia en altura, nada menos que en el Aconcagua. Por aquel entonces, vivió durante 62 a 6.962m de altura, en la cumbre del coloso de América. Plantó allí una tienda, y aguantó en solitario esos dos meses y un poco más.
Su hazaña cobró picos de gran emotividad gracias a las conexiones radiofónicas que, cada cierto tiempo, realizaba con la cumbre el periodista José María García, a través de un complejo sistema de radioaficionados que le ponían en comunicación con Fernando. García llegó a poner en contacto al Rey y al Presidente del Gobierno de entonces, Felipe González.
Ese fue su comienzo. Luego vinieron otras cosas. Un ascenso en solitario al Cho Oyu dos años después de aquella epopeya, en la que se convirtió en el primer ascenso a un ochomil en invierno y en solitario. Y, por supuesto, muchos otros ascensos a lo largo de todos estos años.
También charlamos con otros referentes de la montaña, como la alpinista Marta Alejandre, la única mujer aragonesa que ha coronado un 8.000. Lo ha conseguido en dos ocasiones, el Dhaulagiri nepalí en el 2008, y el Gasherbrum de Pakistán al año siguiente.
En esta edición también nos acompaña el campeón del mundo de ultratrail (carreras en alta montaña) Luis Alberto Hernández y que, además, es vidas en su vida diaria, ya que es guardia civil de rescate. Ser guardia civil a ser campeón del mundo explica Hernando. Me pagan es por salvar vidas. De ahí su extraordinario compromiso con este trabajo que logró por oposición y que, a diferencia del campeón del mundo, durará toda la vida.
Entró a la Guardia Civil y a su equipo de biathlón, donde aprendió a entrenarse de manera profesional. Desde 2004 corrió en el equipo nacional en la Copa de Europa y en la Copa del Mundo de Biathlon, y se clasificó para los Juegos Olímpicos de Invierno en Turín 2006.
De 2007 a 2009 cambió al equipo nacional de esquí de fondo donde pudo aprender aún más y vivir el deporte profesional en lo bueno y en lo malo.
El espíritu competitivo lo lleva impreso en su ADN desde pequeño, ya que su padre llegó a ser campeón del mundo de maratón de veteranos con 46 años. Hernando cambió el biathlon por el equipo nacional de esquí de fondo. Pero el infortunio de las lesiones cortaron en seco su trayectoria. Una hernia y una fractura del peroné a punto estuvieron de dejarle fuera de la competición profesional. Sin embargo, el destino todavía no había dicho su última palabra, y en 2010, Luis Alberto se vio disputando el Campeonato del Mundo de Skyrunning en Italia. El resultado fue una medalla de plata que le enganchó definitivamente al ultrafondo.