Cambiar la hora disminuye el riesgo de diabetes y los accidentes
El horario de invierno permite una mejor nutrición y un descanso de mayor de calidad, asegura el doctor Gonzalo Pin
Cambio de hora. / Sandor Ujvari (EFE)
Madrid
Este fin de semana, hoy, hemos cambiado de horario y hemos adoptado el de invierno. El día de hoy cuenta con 25 horas y este retraso en el reloj afecta a nuestro organismo. Pero a diferencia de lo que se argumenta habitualmente... Puede ser incluso beneficioso.
El horario de invierno es el menos malo para nuestro organismo ya que acerca nuestros ritmos a los que corresponden por las horas de sol disponibles. Esto tiene muchas ventajas: "Al adelantar nuestros horarios de alimentación y darnos la oportunidad de dormir un poco más, puede contribuir a disminuir el aumento de la obesidad", cuenta Gonzalo Pin.
El especialista del Hospital Quironsalud de Valencia incide en que esta disminución de la obesidad también conlleva un descenso en el riesgo de sufrir diabetes. Y como descansamos más y mejor, también reduce la tasa de accidentes.
Si bien es cierto, como reconoce el experto, que el cuerpo necesita unas semanas para adaptarse, sobre todo en el caso de niños y ancianos... Al final los beneficios merecen la pena.
