Buenas intenciones

Ya sabemos que la ONU está llena de buenas intenciones pero también que funciona mal y que sus resoluciones no han impedido grandes desastres bélicos como la Guerra de Irak. Hace mucho tiempo que es evidente que el organismo multilateral creado para tratar de no hacernos daño precisaba con urgencia de una reforma. Pero no se hizo, y cuando los problemas no se enfrentan, se pudren. No, eso no pasa solo en España, aunque lo creamos. Y ahora llega Donald Trump a decir que él lo va a arreglar. Las desgracias, ya ven, nunca vienen solas. Tanto dejarlo para más adelante lque al final su reforma la promueve un ultra que en el fondo no cree en ella. Veremos qué da de sí Donald Trump en la primera asamblea de la ONU como presidente de Estados Unidos. Y justo cuando la otra gran amenaza, la de Corea del Norte, se hace patente cada día. Por cierto, el gobierno español ha expulsado al embajador de Kim Jong-un por las pruebas nucleares del régimen de Pyongyang.

Primera asamblea de la ONU con Trump como presidente y con Reino Unido saliendo de la Unión Europea y con una grave crisis en el gobierno británico, porque los halcones del Brexit andan a la gresca entre ellos. La primera ministra Theresa May y su ministro de Exteriores, Boris Johnson, no se ponen de acuerdo sobre la factura a pagar a Bruselas para poder acceder al mercado único una vez se hayan ido del todo.

Todo esto está pasando por el mundo estos días en los que no levantamos la cabeza de nuestro gran debate nacional.