La motosierra que revolucionó el género de terror
Jack Bourbon continúa viendo películas de terror como forma de terapia para curar su fobia. Esta semana su psiquiatra le ha recomendado La matanza de Texas del recientemente fallecido Tobe Hooper.

Gunnar Hansen como Leatherface

Madrid
En 1972 el director Tobe Hooper y su amigo, el guionista Kim Henkel, se propusieron realizar la película de terror definitiva. Analizaron numerosas películas de este género y llegaron a una conclusión: había que personificar toda la esencia del mal en un ser humano descartando cualquier elemento sobrenatural. Con esa idea en la cabeza se inspiraron en un caso real que había ocurrido unos años antes, la historia de un demente que se había dedicado a profanar tumbas para robar los cadáveres. Ese fue el germen de uno de los films más aterradores de todos los tiempos: La matanza de Texas.

Elio Castro
Licenciado en Historia del Arte y Máster en periodismo por la Universidad Autónoma/El País. Periodista...