Un símbolo para todos
Si durante la larga lucha contra ETA los partidos tuvieron muchas dificultades para mostrarse unidos, milagro hubiera sido que los forcejeos no reaparecieran a la hora de recordar o de comemorar.

Iñaki Gabilondo | 'Un símbolo para todos'
01:49
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
No es de extrañar. Si durante la larga lucha contra ETA los partidos tuvieron muchas dificultades para mostrarse unidos, a pesar de que no paraban de predicar unidad, milagro hubiera sido que los forcejeos no reaparecieran a la hora de recordar o de comemorar. Con motivo del aniversario del secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco nos hemos encontrado con la decepción de los pulsos y de los regateos.
Más información
Históricamente fue el PP el que más empeño en jugar por libre como si se sintiera el abanderado titular en la lucha antiterrorista y se negarA a compartir méritos con los demás de cuyas intenciones siempre recelaba. Los ejemplos son muchos y sangrantes y uno de los más bochornosos se produjo precisamente durante el concierto homenaje a Miguel Ángel Blanco en la Plaza de Toros de Las Ventas en septiembre del 97 donde se vio que a los populares le sobraban todos los demás.
Pero ahora es el PSOE el que cicatea y Podemos, que entonces no existía, pone pegas a otorgar a Miguel Ángel Blanco un protagonismo especial porque dice que hubo muchas otras víctimas y no es bueno singularizar. Eso es cierto pero a mi juicio se equivocan. Cuando los símbolos los crea un artificio se pueden discutir pero cuando brotan espontáneamente adquieren una nueva dimensión y han de ser reconocidos así. La historia está llena de ejemplos: ¿la niña de Vietnam fue la única niña quemada por el napalm? Manuela Carmena conoce mejor que nadie uno de sus ejemplos: la matanza de Atocha.
En el caso de Miguel Ángel Blanco, por la suma de distintas circunstancias, el horror generó una reacción de tal amplitud y tan ancha propagación que cambió de plano e ingresó en el de la referencias populares al tiempo que cambió el signo de la lucha antiterrorista. Yo no creo que Ernest Lluch o Casas o Jauregui o Múgica o Lacalle o Pagazaurtundua tuvieran el menor inconveniente en ser representados por un humilde concejal de 29 años.

<p>El PP lleva años dictando a los demás cómo deben expresar su homenaje a las víctimas. Mientras, una parte de la izquierda sigue dispuesta a dejarse arrebatar la herencia de sufrimiento</p>