Asociaciones de consumidores: se las quieren cargar
Madrid
Tienen el gatillo fácil para denunciar. No son cómodas, y su presencia no gusta. Saber que están husmeando cerca incomoda, como que te están mirando con lupa el producto que vendes, que fabricas…
Son las asociaciones de consumidores, que en los últimos años han conseguido muchos logros a favor de los consumidores contra el gran poder de la banca, o los operadores de telefonía, o la industria alimentaria. Entre otros muchos con los que nosotros, los consumidores, tenemos contacto a diario… ¡y no siempre amistoso!
Han conseguido poner freno a muchos abusos. Desde las preferentes a las cláusulas suelo, o los cobros por la formalización de las hipotecas. Y a los abusos de las compañías aéreas, por los retrasos, por los precios, por el rooming, el overbooking, por las indemnizaciones que no llegan…. Y los abusos de las eléctricas por los precios, o por los contratos irregulares de comerciales que te cambian de compañía sin enterarte, a base de engaños… Y los problemas con los portabilidades, con las líneas, las velocidades prometidas que nunca llegan de los operadores de telefonía. Sin olvidar los otros mil y un problemas que cada día sufren miles de usuarios en el bar, el restaurante, la tintorería, la charcutería, el taller, el seguro, en las compras por internet…
Y ahí está su presión ante los responsables de consumo, autoridades nacionales y europeas, su denuncia constante en los medios de comunicación, en sus propios medios, a través de las redes en los últimos años, denunciando, ofreciendo información útil para evitar engaños y más engaños. Abriendo los ojos a mucha gente. Enseñando nuestros derechos, nuestras alternativas para plantar cara… Por eso son incómodas y no gustan, a grandes y pequeños poderes económicos.
Y por eso se está haciendo todo lo posible, administraciones incluidas, para que tengan poca fuerza, pocos medios, ahogarlos económicamente, que no tengan posibilidades de hacer estudios, investigaciones, denuncias que pongan en entredicho a esos poderes. Y lo están consiguiendo. No se quiere incomodar a los que mandan…
Pero se equivocan. Los consumidores tenemos recursos, cada vez más formación y cada vez sabemos utilizar mejor los múltiples canales y alternativas que nos ofrecen las redes. Además, el hueco que va dejando la debilidad de algunas asociaciones ya lo están ocupando otros que, por su propio interés, pero con todo el derecho del mundo, saben que ahí hay negocio. Millones de consumidores que tendrán auxilio – ya lo tienen muchos - en otros profesionales, por ejemplo del derecho, que van a seguir velando por los intereses de la mayoría. Además, a otras, que no viven de subvenciones, no van a tener fácil doblegarlas…
Mañana es el Día Mundial de los Derechos de los Consumidores. Pues bien, parece obvio que en algunas cosas estamos dando pasos hacia atrás… Es lo que quieren.