La Policía sospecha de un trabajador de los Goya por el robo de 30.000 euros en joyas

Madrid

La investigación de los funcionarios de la Comisaria de San Blas se centra en los trabajadores de la organización del evento que prestaron servicio durante la gala y más concretamente en un trabajador sobre el que la Policía estrecha el cerco. La sustracción de las joyas se produjo durante la ceremonia cuando la habitación en la que se encontraban varias cajas con las alhajas ya no era utilizada por las actrices que la ocuparon para vestirse.

Pero la importante red de cámaras de circuito cerrado que posee el Hotel Auditorium han captado todo y a todos los que pasaron por la zona en esas horas en las que los invitados asistían a la entrega de premios.

La Joyería Suarez señala en su denuncia que la sustracción de las joyas y al menos dos relojes ronda los 30.000 euros. Por cierto, los cacos también actuaron sobre los fotógrafos que cubrían el acto: dos objetivos y dos baterías de cámara han desaparecido.

No se guardaban bajo especiales medidas de seguridad

En dicha habitación se guardaba además ropa y complementos utilizados durante la gala. Las joyas sustraídas estaban depositadas en cajas en dependencias correspondientes al departamento de vestuario y supuestamente no se guardaban bajo especiales medidas de seguridad ni dentro de cajas fuertes.

Las citadas fuentes han destacado la dificultad que conlleva la investigación policial por tratarse de una habitación en la que entraron y salieron numerosos actores, además de técnicos y trabajadores empleados durante la gala. La organización de la 31º gala de los Goya ya ha ofrecido a la Policía un listado de los empleados de la última ceremonia.

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La denuncia del robo fue interpuesta a primera hora de la tarde del lunes por el jefe de producción de la Academia. Según la denuncia, fue durante el recuento de la ropa y las joyas utilizadas para su devolución a las marcas que acceden a su préstamo cuando se percataron de que faltaba este material de la marca Suárez.

Un robo que se suma a otros como el que vivió Lupita Nyong'o en los Oscar de 2015 cuando unos ladrones entró en la habitación del hotel donde se hospedada en Hollywood para hacerse con su diseño de Calvin Klein valorado en 150.000 dólares. La historia terminó bien para ella pues su vestido fue devuelto.

Y por último, no podemos dejar de hablar del multimillonario y polémico robo que sufrió Kim Kardashian en París. La celebrity estadounidense fue atacada por un grupo de ladrones que se llevó 16 millones de euros en joyas.