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Morir de risa

Un incontrolado y repentino ataque de risa podría acabar con la vida de un adulto. ¿Qué le ocurre a nuestro cuerpo para que esto suceda?

Morir de risa no hace gracia. / Pixabay

Morir de risa no hace gracia.

Madrid

La tristeza, en situaciones extremas, puede hacerte descender al abismo y provocarte la muerte. Te lo contamos en nuestra cápsula ‘Morir de pena’. Pero no creas que la felicidad y la risa es siempre sana y liberadora. Puede ser letal como la más profunda de las depresiones.

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En el proceso de la risa intervienen cientos de músculos que aceleran el ritmo cardíaco y alteran la respiración. En cuestión de segundos, la hilaridad dará paso a la angustia. La imposibilidad de detener la risa impedirá a tus pulmones renovar el aire. Tu organismo estallará entre carcajadas.

 
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