Cuando la precariedad del sector de la enfermería se convierte en 'best seller'
El enfermero Héctor Castiñeira, como su personaje, encadena quinientos contratos eventuales, más de cuatro cientos de ellos de una duración de cinco días o menos
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Imagen de Héctor Castiñeira firmando ejemplares en la pasada Feria del Libro de Madrid. / PRH Grupo Editorial
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Madrid
Satu es una enfermera treintañera que encandena contratos precarios y los peores turnos. Esta es también la situación que vive su creador, Héctor Castiñeira, más conocido como Enfermera Saturada, el seudónimo con el que firma los libros que relatan las peripecias de esta enfemera precaria. Castiñeira publicó hace un mes Las uvis de la ira, el tercer volumen de las aventuras de Satu, que ya va por la tercera edición.
'Enfermera Saturada', precaria y emigrante
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"Yo llevo firmados más de quinientos contratos en los últimos 11 años, desde que acabé la carrera. De ellos, más de cuatrocientos son de una duración de cinco días o menos", ha revelado Castiñeiro. Su situación no es única. El enfermero ha asegurado que él es un caso más de los muchos compañeros que trabajan en estas condiciones en la sanidad pública.
En este tercer libro, Satu, como muchos enfermeros españoles, decide emigrar a Reino Unido. Para ambientar la historia, Castiñeira habló con amigos que trabajan allí y hasta viajó a Londres para ver cómo es el proceso de selección, cómo es el día a día. "Hay mayor reconocimiento social, los contratos son mejores, hay una mayor retribución, pero al final está la parte en la que te hacen firmar un contrato de permanencia, como si fuera una compañía de teléfono, y algunos pacientes no quieren ser atendidos por enfermeras extranjeras", ha detallado.
Castiñeira, al igual que Satu, al principio iba de un hospital a otro. Ahora hace años que trabaja en el mismo, pero nunca en la misma especialidad. Unos días está en urgencias, otro en la UCI y al siguiente en maternidad. Por ello, ha asegurado, ha pensado algunas veces en cambiar de oficio, pero la vocación puede más: "Al final, Francino, es como comentabas en tu programa, uno no trabaja de enfermero, uno es enfermero".