El laberinto de Ruiz Zafón

Madrid

Hoy les hablamos desde un lugar especial y con un contenido y unos invitados también muy especiales para abrir el programa. Estamos en la montaña del Tibidabo, en Barcelona, que es uno de los escenarios fundamentales en el universo literario de Carlos Ruiz Zafón. Aquella trama que arrancó con La sombra del viento y siguió después con El juego del ángel y El prisionero del cielo termina ahora, ¡y de qué manera! Con El laberinto de los espíritus.

Han pasado quince años, la saga acumula ya 25 millones de lectores en todo el mundo y Ruiz Zafón se ha convertido en el escritor en lengua española más leído después de Cervantes. Todo eso está muy bien, sin duda, supone un retrato del éxito apabullante, pero yo creo que el gran valor, la mejor aportación de esta saga, de este cuarteto de El cementerio de los libros olvidados es la defensa y la reivindicación que hace de la lectura; y de la palabra escrita, desde luego.

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El laberinto de los espíritus, igual que sus predecesoras, nos sitúa en un mundo muy real, que es el de la Guerra Civil y la dictadura franquista, pero con toques mágicos; con esos sentimientos y esas pinceladas que sólo son posibles desde la literatura. Planteando dilemas morales, preguntas, dudas…con personajes que te colocan ante los grandes retos de la vida. Y sobre todo con una deuda pendiente que tiene este país con su memoria –y que no voy a desvelar- pero que explica no sólo el desenlace de la trama literaria, sino muchas de las miserias, de los rencores, y también de las grandezas que han llegado hasta nuestros días.

Así que hoy estamos muy contentos de acoger en La Ventana a alguien como Ruiz Zafón, pero más contentos aún de contribuir a que los libros y la palabra tengan el peso que merecen. Cultura es sinónimo de libertad, por eso los nazis quemaban libros. Y por eso es una gran noticia que alguien se haya inventado un cementerio para los libros olvidados