Otro modelo de poder

Madrid

Llevamos muchas sorpresas, una especie de sorpresas ya programadas y esto empieza a ser algo realmente muy inquietante. Algo está pasando en todo el mundo occidental y no solamente es producto de una manipulación o de las falsas verdades. Yo creo que corresponde también a un enfado muy grande, que tiene una parte de la población, que se siente marginada y que se coloca y vota en los márgenes del sistema y eso es algo muy preocupante; terriblemente preocupante y que en este caso además se produce en la mayor potencia del mundo que es previsible que va a quedar aislada. Trump es un aislacionista, un típico aislacionista americano. 

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La alternativa tradicional les parece demasiado tradicional probablemente. Lo que ellos ven es que la alternativa que les proponía la señora Clinton, siendo como es, la mejor candidata que han tenido nunca porque es una mujer realmente con muchísima experiencia, con muchísima capacidad pero está claro que una parte importante de la población, es decir, la mayoría de la población ha considerado que responde a un modelo de ejercicio del poder que no quieren. El problema es que tampoco está claro cuál es el otro modelo de poder que quieren, porque si el otro modelo fuera Trump nos tendríamos que echar a temblar todos.

Seguramente entre esos cincuenta y tantos millones de votantes de Trump no hay tanta gente racista, seguramente no. Pero han votado situándose fuera del sistema porque están hartos del sistema.