Pistas sobre talantes

Madrid

El presidente del Gobierno anunciará en menos de 24 horas, se supone, su nuevo gabinete. No es un dato menor. Dado que Mariano Rajoy no explicó en la sesión de investidura prácticamente nada de su programa para los próximos cuatro años -excepción hecha, quizás, de su voluntad genérica de mantener lo hecho hasta ahora y de dialogar sobre el eventual desarrollo de esas bases-, el nombramiento de los nuevos ministros se ha convertido casi en una pista sobre ese nuevo y pretendido talante de dialogo.

Ampliar

Cerrar

Por ejemplo, mantener a Jorge Fernández Díaz en el gabinete, cuando ha sido reprobado en el Congreso por toda la oposición, podría parecer síntoma de mal ánimo o malquerencia. Daría lo mismo que abandonase el ministerio del Interior y que pasase a otra cartera porque la reprobación suponía rechazar al señor Fernández Díaz como miembro del Gobierno, en términos generales. Por ejemplo, mantener a Rafael Hernando como portavoz en el Congreso no sería tampoco una señal de mucha voluntad de negociación porque el señor Hernando se ha caracterizado en la legislatura anterior por sus enfrentamientos personales con destacados miembros de la oposición. Es decir, que el problema no es que el señor Hernando sea un parlamentario duro, en términos políticos, sino que es ofensivo en términos, digamos, particulares.

Los dos cambios seguramente ayudarían a mejorar el clima en el Congreso de los Diputados, ya bastante alterados con la actuación de su presidenta, pero no cabe hacer muchas suposiciones. Hasta ahora, Mariano Rajoy ha demostrado tener un peculiar sentido del humor.