El accidente del tren en Angrois, tres años después
Repasemos los sonidos de la tragedia en la que perdieron la vida 81 personas, el 24 de julio de 2013

Accidente del tren de Santiago / Cadena SER

El silencio inundó Santiago de Compostela en plenas fiestas del Apóstol hace ahora tres años, el 24 de julio de 2013, un día que Angrois nunca olvidará. Tampoco las víctimas del accidente ferroviario, que desean que finalice la investigación y se depuren responsabilidades para "poder descansar", mientras siguen sin cesar "el dolor y el sufrimiento".
Ni PP ni Psoe están dispuesto a día de hoy a abrir una comisión de investigación sobre el accidente de Angrois en el Parlamento gallego. Sus portavoces, Pedro Puy y Raul Fernández dicen que no es prudente pedir responsabilidades políticas cuando todavía no se sabe que pasó exactamente en la curva de A Grandeira.
Las victimas piden la dimisión de Ana Pastor a la que responsabilizan junto con el exministro socialista Jose Blanco de impedir que se sepa la verdad última del accidente de Angrois que costó la vida a 80 personas.
Este domingo no había ningún representante del PP o del PSOE con las víctimas, que son los que tienen la llave para crear una comisión de investigación en el Congreso. En el Obradoiro sí había representantes del resto de partidos.
Este mes de julio se ha desvelado el contenido del informe encargado por la Comisión Europea a la Agencia Ferroviaria Europea (ERA), sobre las indagaciones llevadas a cabo por la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF), y que concluyó que el suceso no se investigó "de forma independiente como requiere la Directiva de Seguridad Ferroviaria". A través del mencionado informe, Bruselas ha concluido que la investigación de la CIAF, organismo dependiente de Fomento, "no fue independiente, ni determina las causas raíz/estructurales del accidente".
Mientras, el maquinista continúa siendo el único imputado por un error humano, al no frenar a tiempo en la curva de Angrois a la que llegó a unos 190 kms/h en un lugar limitado a 80 a menos de tres kilómetros de la estación de Santiago y mientras iba hablando por teléfono con otro operario que estaba dentro del tren.