La película del PP

Madrid

De los creadores del vídeo de Rajoy en la Moncloa, de frente y de perfil, y con música de centro comercial de fondo, llega hoy el vídeo de lo malo malísimos que son los extremistas que gobiernan en parte del territorio español. Según el vídeo, allí donde gobiernan hay más paro, se pagan más impuestos, tasas arbitrarias, las empresas se van espantadas, se pone en peligro la unidad de España, se coloca a los amigos y conocidos en las instituciones y organismos oficiales. Vaya, que son lo peor.

Y todo esto el PP lo compara con la gestión ejemplar e intachable de los gobiernos populares, donde parece que se vive en el país de las maravillas, sin paro, con impuestos bajos, con las empresas instalándose sin parar, sin enchufismos… ¡Ah!, y sin corrupción. Porque en el vídeo de este tema no se habla, ya conocen ustedes la máxima de Rajoy: ‘si no se habla de un problema, si no se pronuncia un nombre este no existe’.

Lástima que el vídeo sale en la luz la misma semana en la que Bruselas habla del incumplimiento del déficit, aunque le da oxígeno a Rajoy hasta julio para que supere las elecciones; en la misma en la que le dice al gobierno que salga de estas elecciones que va a tener que recortar 8 mil millones de euros; la misma semana en la que hemos escuchado el relato del saqueo de la Púnica; y, mala suerte, en el mismo día en el que la Guardia Civil hace un informe sobre las contrataciones a dedo en la empresa Imelsa, y eso que dice el vídeo del PP que el enchufismo es solo cosa de los extremistas.

El vídeo es de una desfachatez estratosférica y, lo que es peor, destinado a unos ciudadanos que el PP debe pensar que no piensan, que no leen o que no se informan. Si siguen con nosotros en unos minutos vamos a enfrentar las afirmaciones del vídeo con la realidad, y la realidad es la que ustedes conoce. Lo del vídeo es la ficción.