Inteligencia artificial y racista
Microsoft se ve obligada a retirar un programa informático que había mostrado su simpatía por Hitler en las redes sociales
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/V5H3P3EJSRMWJPXX3IHC2PTPRQ.jpg?auth=752d9fcfd70e29eb96f0906930610754023ba0ef89bbbdd0f88c19ba855f166b&quality=70&width=650&height=365&smart=true)
Pretendía ser una agradable joven... pero no salió bien del todo. / TWITTER
![Pretendía ser una agradable joven... pero no salió bien del todo.](https://cadenaser.com/resizer/v2/V5H3P3EJSRMWJPXX3IHC2PTPRQ.jpg?auth=752d9fcfd70e29eb96f0906930610754023ba0ef89bbbdd0f88c19ba855f166b)
Madrid
La inteligencia artificial avanza, pero no siempre sale según lo previsto. Los fracasos ya no son solo cuestión de la ciencia ficción, como aquellos Terminators de la saga de Arnold Schwarzenegger. A Microsoft le ha salido rana un proyecto Tay IA, apenas le ha durado 24 horas. Destinado a aprender más sobre el diálogo entre ordenadores y humanos, Tay empezó a difundir mensajes racistas y de simpatía nazi. "Desafortunadamente, a las 24 horas de ser colocada en línea, nos percatamos de un esfuerzo coordinado de algunos usuarios para abusar de las habilidades de conversación de Tay para que respondiera de forma inapropiada", ha explicado Microsoft en un comunicado.
ÍÑIGUEZ (2') / LO SIGUIENTE 26 DE MARZO
02:34
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Por mejor camino, más correcto, más educado funciona AlphaGo, un proyecto de Google especializado en el juego de mesa asiático e histórico Go. El programa informático de inteligencia artificial ha sido capaz de derrotar al campeón mundial de ese juego, lo que ha despertado ciertas dudas éticas. Fundamentalmente, sobre los límites del aprendizaje y el control humano sobre la inteligencia artificial. No vaya a ser que aprendan más y mejor que nosotros.
Tay y AlphaGo no dejan de ser un programa informático, complejo, claro, pero programa informático. Sophia ya es otra cosa, quizá más inquietante. Tiene rasgos humanos, expresiones faciales y es capaz de mantener conversaciones. Su inteligencia también evoluciona y es capaz de reconocer caras. Lo que no sabemos es si terminará como el célebre robot de Schwarzenegger, porque ante una pregunta de un periodista de la CNBC, Sophia terminó admitiendo que iba a destruir humanos: