La vanidad de los candidatos
Muestran una opinión tan alta de sí mismos que parecen estrellas de Hollywood

El revés del derecho 09 diciembre
00:47
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Madrid
Entre las cosas que me sorprenden del ejercicio político está la vanidad de los candidatos, que muestran una opinión tan alta de sí mismos que parecen estrellas de Hollywood antes del crepúsculo. Lo peor no es eso, sin embargo; lo peor es cómo desprecian a los que tienen enfrente, como si ya hubieran ganado o tuvieran una bola de cristal en la que advierten los colores de sus respectivos triunfos. Y aun hay algo peor: cuando los de distintas tendencias se confabulan para arremeter contra uno solo de los contrarios. Ese aire de trileros que les da la arrogancia dice muy poco de un oficio de servicio público.