Diluvio de encuestas
"Me irrita es el uso que se hace de las encuestas como sustitutivo de un debate político más auténtico"
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La opinión de Francino | Diluvio de encuestas
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Madrid
No sabría decirles cuándo empezó el fenómeno, pero sí que en los últimos años se ha disparado: las encuestas ya forman parte de la munición indispensable para el combate político; bueno, no sólo eso: es que cada vez lo condicionan más. Y si alguien me pregunta: pero, entonces ¿tú estás en contra de las encuestas, te parecen mal? Pues no; no estoy en contra ¡para nada! Es más, creo que tener sondeos fiables, profesionales, tomar la temperatura social cada equis tiempo es signo de un país moderno, democrático y civilizado. No, lo que sí me irrita –y no creo ser el único- es el uso que se hace de las encuestas como sustitutivo de un debate político más auténtico; más abierto, más transparente y sin tantas condiciones como suelen poner.
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Ahora, por ejemplo, en apenas una semana se han publicado media docena de sondeos – con resultados, por cierto, no exactamente iguales, el último el de hoy del CIS- y eso genera un gran debate....pero debate virtual; sobre hipótesis, sobre proyecciones, yo subo, tú bajas, yo saco pecho, tú menos....que está muy bien, da mucho color; bueno, estaría muy bien si no robara tanto tiempo y tanto espacio al debate de verdad, al que consiste en confrontar ideas y programas. Al final, el resumen –al menos para mí- sería: menos eslóganes, menos propaganda, menos disfraces, menos interpretar encuestas... y más verdad. Porque la verdad es lo que cimenta la confianza. Y la confianza es el gran déficit que tienen ahora mismo los partidos políticos –unos más que otros- con respecto a los ciudadanos. O sea, que no nos mareen mucho con cifras y porcentajes y que nos digan qué proponen para gobernar este país. Es lo único que necesitamos para tomar una decisión el 20 de diciembre.