Que el griterío no oculte las voces de quienes piden ayuda

Madrid

A estas horas de la noche ya saben que arrancamos temporada y lo hacemos con el mismo compromiso de siempre, informar, explicar, contar, escuchar, preguntar y repreguntar. Llevan muchos años depositando la confianza en nosotros y una temporada más intentaremos no defraudarles, aunque, si quieren que les diga la verdad, cada vez nos lo ponen más difícil.

Ya saben que la prensa a muchos les asusta, las preguntas les molestan y que investiguen sus trapos sucios les pone muy nerviosos. Hay quien ha llegado a decir que eso de la corrupción sale de las tertulias, ni de los despachos ni de las sedes de los partidos políticos. Nosotros vamos a insistir en eso de preguntar, otra cosa es que nos contesten o, lo que es peor, que acepten nuestras invitaciones.

Pero sobre todo lo que queremos es aportar calma al debate, a cualquier debate. Darnos y darles tiempo para la reflexión, huir del ruido o intentar que se nos escuche en medio de ese ruido. Pero sin hacer nosotros más, sin gritar, utilizando los argumentos, el análisis, la reflexión de los que saben, contratando opiniones, pareceres, porque no nos gusta mucho eso del pensamiento único, hablar y dejar hablar, escuchar y pedir que nos escuchen.

Arrancamos una temporada muy propicia al ruido, en nada empieza la campaña electoral para las catalanas, en nada esas elecciones catalanas, poco después las elecciones generales, seguiremos con los casos de corrupción, veremos los primeros resultados de la gestión de los nuevos ayuntamientos y nuevas comunidades, temas que a los voceros y vociferantes les encantan. Son capaces de convertir en polémica la anécdota más irrelevante.

Nosotros vamos a seguir con nuestro tono, confiando en que ustedes sigan manteniendo la confianza en nosotros e intentando no defraudarles, es nuestra responsabilidad ante esa confianza. Y vamos a intentar también que el ruido no apague las voces que más gritan, pero están reclamando ayuda. Que el griterío nacional no sofoque las voces de los que piden nuestra ayuda. Este es también nuestro compromiso.

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