Darse el “sí, quiero” en una playa canaria ya es posible
Viajamos a Tenerife para conocer la decisión de permitir las bodas en algunas playas de las islas
Celebrar una boda en una playa canaria requerirá, entre otros trámites, abonar una fianza reembolsable de entre 200 y 300 euros. / GETTY
Madrid
Elegir la vestimenta de los novios en una boda suele ser una costosa tarea. El vestido, el chaqué... Pero hay una prenda por la que, desde ayer, no tendrán que preocuparse varias de las parejas que quieran celebrar su enlace en Canarias: los zapatos. La delegada del Gobierno en las islas anunció ayer que ya se pueden celebrar ceremonias nupciales en algunas playas del archipiélago. Esta mañana en Hoy por hoy hemos viajado hasta Tenerife, de la mano de nuestra compañera María Calzadilla, para conocer los detalles de esta noticia.
“Poder celebrar bodas en las playas era una vieja demanda del sector turístico canario”
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Se trata de una medida que, desde hace años, venía demandando el sector turístico, aludiendo que otros destinos competidores ya contaban con este reclamo para los visitantes que quieran contraer matrimonio a orillas del mar.
Si bien antes las bodas en las playas no estaban prohibidas, requerían una larga lista de permisos. Con la nueva normativa de costas, los trámites y el proceso de organización se han agilizado considerablemente. Entre otras novedades que incluye la nueva ley, ahora se permite utilizar los tramos urbanos de las playas para este tipo de celebraciones.
Para dar el "sí, quiero" en las costas de las islas es necesario solicitar un permiso en el servicio provincial de costas, donde debe figurar fecha, hora, número de invitados y la posible instalación de elementos decorativos móviles como carpas, sillas o mesas.
En cuanto a los costes de estas ceremonias, los iorganizadores de nupcias en la arena tendrán que abonar una tasa del 8 por ciento del beneficio total esperado, además de una fianza de unos de entre 200 y 300 euros que será devuelta en su totalidad si la playa queda en perfecto estado.
