Estudio sobre la felicidad
El CIS ha publicado un estudio en el se refleja que ocho de cada diez españoles se consideran felices o muy felices pero, ¿en qué consiste realmente ser feliz?

La felicidad, ¿estado de ánimo, emoción o sentimiento? / GETTY

Madrid
¿Somos tan felices los españoles ? ¿En qué consiste la felicidad? ¿Qué hacemos o necesitamos para considerarnos felices? ¿Es una tendencia o un estado de ánimo?
¿Somos los españoles felices?
17:35
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Estas y otras dudas son las que surgen después de haber leído los resultados del último estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) que señala que el 84% de los españoles se declara feliz. En una escala que va desde el cero (completamente infeliz) hasta el diez (absolutamente feliz), la mayoría de las personas consultadas se identifica con un estadio bastante satisfactorio, cercano al diez.
Si bien es cierto que no hay fórmulas mágicas para alcanzar la felicidad, porque para cada uno es radicalmente distinta; hay senderos que podemos seguir para alcanzar una condición, como una gestión eficaz de las expectativas y el 'bien ser'.
El primero de estos planteamientos responde a una tendencia, cada vez mayor, a que la búsqueda de la felicidad (casi impuesta socialmente); a menudo desemboca en un pozo de frustración que no permite avanzar. Es vital que aprendamos a equilibrar anhelos con una coherencia integral que permita que vayamos creciendo espiritualmente mientras vamos alcanzando nuevos niveles de satisfacción.
El 'bien ser' se relaciona directamente con el bienestar, un concepto bastante manido y denostado en los últimos tiempos, que procura que la individualidad de cada sujeto sea íntegra y consecuente con su universo cercano, mientras nos vamos arropando de situaciones propias y ajenas que nos enriquezcan. La felicidad individual, cuando el mundo exterior se desmorona, es una empresa egoísta y poco realista a la que no podemos aferrarnos. Supone una alienación total de lo real y sesga gran parte de lo que nos rodea.
Aplicación en la vida real
El filósofo Emilio Lledó referenció a grandes maestros de la filosofía como Epicuro o Kant, cuando planteaba establecer la educación como fuente primigenia de la felicidad, la cual nos debe ir guiando para no causarnos desesperación a la hora de figurar situaciones o hechos ilusionantes, ni presunción, argumentando esto último como "el pensamiento de que ya se posee algo que solamente se espera".
Por su parte, Javier Gomá definió la felicidad como el paradigma de la perfección, remitiendo al uso de los —maltratados— tópicos como fuente fiable de producción de alegría y buena ventura (la familila, los amigos, la salud...)
Sentimiento, emoción o estado de ánimo, la felicidad es ese estadio —eminentemente mental— en el que todos queremos residir de manera más o menos continua, y una clave para conseguirlo es, siendo conscientes del marco social en el que nos desenvolvemos, tender a la libertad individual, a la expansión del pensamiento y al reflejo de dignidad que nos devuelva el espejo al mirarnos para reconocernos.
Solo así, con profunda gratitud y un alejamiento del materialismo superficial e instantáneo, estaremos más cerca de lo que podríamos definir como la felicidad.