También a los nuevos les cuesta hablar con claridad
José María Izquierdo reflexiona sobre las similitudes en el uso del lenguaje de la vieja y la nueva política

También a los nuevos les cuesta hablar con claridad
01:17
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Madrid
Parece ser que a todos los políticos, desde luego a los representantes de la vieja guardia, pero también a quienes se encuadran en la categoría de pimpollos, les gustan las palabras rimbombantes y las frases ampulosas para que una vez unidas, formen un batiburrillo espeso e incompresible. Mejor la oscuridad en el lenguaje, y en la ideología, si a eso vamos, que ya se encargarán los jefes de interpretar lo que así han querido enmascarar.


Ni soy de aquí ni soy de allá y además lo embrollo como si se tratara de un acertijo. Las explicaciones de los dirigentes de Podemos sobre las listas a las elecciones generales, por ejemplo, pertenecen a ese embrollo premeditado que siempre esconde un último fin: hacerlo todo lo suficientemente difícil para que al final los interesados desistan y se haga lo que quiere la dirección. O sea, que salgan los designados por la superioridad y, desde luego, que nadie ponga en cuestión al líder supremo.
¡Qué pimpollos tan listos, cómo saben utilizar las viejas fórmulas! Del mismo jaez es la formulación del referéndum griego elegida por Tsipras. ¿De verdad cree el líder izquierdista griego que los jubilados que ayer se empujaban en las colas de los bancos para poder cobrar su mísera pensión, van a leerse todos los documentos a los que obliga la consulta?
Mal está todo, y encima confundimos.