8.000 migrantes siguen a la deriva en las costas del Sudeste Asiático
Tailandia, Malasia e Indonesia expulsan de sus costas a barcos cargados con migrantes de unas aguas territoriales a otras.

JUN01 KUALA LANGSA (INDONESIA) 15/05/2015.- Inmihramtes llegan a bordo de una embarcación pesquera a Kuala Langsa, en la región de Aceh (Indonesia), hoy, viernes 15 de mayo de 2015. El grueso del grupo, 420 bengalíes y 370 rohingyas, se encuentra en la lo / HOTLI SIMANJUNTAK (EFE)

Madrid
Cientos de inmigrantes a la deriva han sido rescatados este viernes ante las costas de Indonesia, aunque la solución global a esta tragedia humanitaria se aleja por la amenaza de Birmania de boicotear una cumbre regional.
El destino de miles de exiliados de Bangladesh o Birmania, que huyen de la miseria o las persecuciones en sus países de origen, se asemeja al drama de los migrantes que intentan llegar a Europa atravesando el Mediterráneo.
Unos 800 migrantes fueron rescatados, tras el naufragio de su barco, por pescadores ante las costas de la provincia de Aceh, en el noroeste de Indonesia. Su barco había sido rechazado ante las costas de Malasia, habitual destino de estos migrantes.
El primer ministro malasio Najib Razak ha asegurado "estar muy preocupado por el sufrimiento" de los migrantes, pero aseguró que su gobierno está tomando las "medidas necesarias".
Mientras, las organizaciones humanitarias han denunciado el juego de "ping pong humano" al que se libran los gobiernos de Indonesia, Malasia y Tailandia.
Según la ONU hasta 8.000 personas estarían a la deriva en el mar, atrapadas en barcos y en peligro de morir de hambre o de enfermedad.
"Según las informaciones iniciales que se nos dieron, han sido rechazados por la marina malasia hasta la frontera marítima con Indonesia", aseguraba Sunarya, jefe de policía de la localidad indonesia de Langsa, en la provincia de Aceh, donde los rescatados fueron desembarcados.
Estas últimas llegadas, suman 1.300 migrantes que han logrado llegar a Aceh en los últimos días.
Reacción internacional
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, ha pedido al Gobierno de Tailandia que acoga temporalmente a los inmigrantes que continúan a la deriva y ha pedido que de manera urgente se llegue a una solución para esta crisis humanitaria.
Por su parte, el alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos, Zeid Ra'ad al Husein se ha mostrado "consternado" por esa política que consiste en rechazar los barcos, porque "conducirá forzosamente a muchas muertes que podrían ser evitadas".
"Instamos a los países de la región a trabajar juntos con rapidez, antes que nada para salvar la vida de inmigrantes que están en el mar, que necesitan un rescate inmediato", ha dicho el portavoz del departamento de Estado, Jeff Rathke.
El director adjunto en Asia de la organización de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch, Phil Robertson, ha advertido de que "el mundo juzgará a estos gobiernos por la forma en que tratan a los hombres, mujeres y niños más vulnerables" y ha pedido que se "deje de jugar a este ping-pong humano".