Rajoy y el Barça

Madrid

¡Qué día más raro!, ¿verdad? Estas fechas así en tierra de nadie, con medio país de fiesta y el otro medio en una especie de "trata de arrancarlo" generan unas sensaciones realmente extrañas. Hay demasiada diferencia entre....pongamos por caso....estarse comiendo ahora mismo la mona de pascua en Tarragona con la familia, hay mucha diferencia con estar currando en una ciudad casi al ralentí como hoy por ejemplo es Madrid. Igual es por eso, por las particulares vibraciones de este día, que le hemos escuchado a Mariano Rajoy decir algo realmente notable: que el Partido Popular funciona a las mil maravillas, que al frente están los mismos que ganaron las elecciones en 2011 y que por lo tanto no piensa hacer cambios. Pues una de dos: o se trata de una maniobra de despiste o en la entrevista de esta mañana en Radio Nacional estaba el presidente tan obnubilado con los buenos datos del paro que ya no tenía ojos para nada más. Porque realmente hay que estar muy mal de la vista; o eso, o pensar que el resto del mundo es lerdo.

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No hay otras explicaciones ante el intento de colar ese mensaje de aparente tranquilidad cuando lo que suena dentro del PP tras el descalabro electoral en Andalucía es el fragor de una tormenta –o una batalla- de tres pares de narices. Pero así es Rajoy....y hasta ahora reconozcamos que no le ha ido mal. Y además, si Luis Enrique tiene líder al Barça jugando como ayer en Balaídos, ¿para qué cambiar? Hombre, yo les diría a uno y a otro que las cosas mal hechas al final siempre pasan factura, pero esta es una modesta opinión personal y además seguro que alguien me acusa de mezclar fútbol y política. Así que mejor lo dejamos; ambos son mayorcitos, que hagan lo que les dé la gana.