Josefina Bonaparte

Madrid

Se ha hablado de ella desde muy distintos planos: pero siempre con la dualidad de haber sido amada y repudiada por su segundo marido, el que la hizo formar parte de los libros de historia: Napoleón Bonaparte.

Mayor que él, viuda y con dos hijos, su encanto personal y su elegancia y saber tratar hicieron que el emperador enloqueciera por ella,  al menos al comienzo de su historia de amor. Trescientas cartas le escribió desde el frente, cuando estaban recién casados. Ella, apenas respondió a diez.

Curiosamente, a pesar de su origen criollo y de haberse divorciado de Napoleón porque no pudieron tener hijos, ella es ancestro directo de la mayor parte de las Casas Reales de Europa.

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Dicen las biografías que Napoleón estuvo dos días encerrado, llorando su muerte. Y que cuando llegó su momento, las últimas palabras que él pronunció fueron: "Francia, el ejército, Josefina".