Esperando al dedo de Rajoy

Madrid

El presidente madrileño, Ignacio González, ha tenido que salir hoy a dar explicaciones sobre la información que publica El Mundo y que cuenta una reunión entre González y tres policías a los que, según la información, les pidió que no trascendiera que él era el inquilino del polémico ático de Estepona, adquirido a través de una sociedad radicada en un paraíso fiscal.

La versión de Ignacio González es completamente diferente. Dice que los policías intentaron chantajearle. Y señala que curiosamente estas informaciones se publican en periodo electoral, y con el PP sin candidatos, aunque él asegura estar dispuesto.

En el PP se ponen de perfil, evitan apoyarle explícitamente, y a la oferta de González de ser candidato a la Comunidad, el silencio desde Génova, donde Mariano Rajoy sigue sin querer desvelar los nombres de los candidatos, aunque parece que a González se le pone cuesta arriba.

La tardanza de Rajoy a la hora de desvelar los nombres de los candidatos le ha permitido conocer antes a sus contrincantes. La primera sorpresa fue Ángel Gabilondo, y la segunda, el viernes pasado, la del poeta Luis García Montero.

Ignacio González insiste en postularse, pero al PP le puede poner nervioso enfrentarle a los candidatos del PSOE e Izquierda Unida, porque aunque judicialmente el caso del ático no haya tocado, al menos de momento, directamente al actual presidente, el caso es tan chusco que le convierte en poco idóneo. Y lo es más todavía por la sombra de sospecha que extiende González más allá del ámbito policial. Alguien más no le quiere bien.

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