Cuando antes ocupen sus escaños, mejor

Madrid

Pablo Iglesias exageró ayer cuando dijo que hacía falta que la oposición contestara al Gobierno y que por eso había convocado el mismo un mitin: para dar respuesta a Mariano Rajoy, como si nadie más lo hubiera hecho. La oposición sí estuvo en el Congreso de los Diputados: de hecho, el martes se escenificó un notable distanciamiento entre el Partido Popular y el PSOE, que no se visualizaba desde hace tiempo. En el Congreso replicó la oposición, por boca de Sánchez, pero también de Alberto Garzón, de Rosa Diez y de otros portavoces. Pablo Iglesias tuvo razón, sin embargo, en resaltar que ayer una parte importante de la atención política ya no estuvo puesta en el Congreso, sino fuera de él. Fundamentalmente, en el mitin del propio líder de Podemos.

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Ayer se constató, sin la menor duda, que el panorama político español ha cambiado vertiginosamente en unos pocos meses y que sigue cambiando según pasan las semanas. Un cambio que inquieta enormemente al establishment pero que en realidad refleja algo muy necesario: la vitalidad de la sociedad española, su deseo de participar y su voluntad de cambiar algunos elementos de su vida en común. Las encuestas reflejan esa vitalidad y la traducen en una imparable fragmentación de la escena política. Los ciudadanos que atendieron al debate en el Congreso eran ya muy conscientes de que dentro de la Cámara faltaban voces que están consolidadas fuera del Parlamento. Cuanto antes puedan ocupar sus escaños, mejor.