"Estas bandas se benefician de la necesidad ajena"

Madrid

¿Bandas criminales en Madrid? Parece de película pero tiene muy poco de ficción. La policia nacional ha desarticulado un peligroso grupo de proxenetas que se disputaban el control de la prostitución en Madrid con un atentado con explosivos por medio. Se ha detenido a seis rumanos que pertenecian a dos bandas lideradas por viejos conocidos de la policia: Dorel, o el Señor del Polígono y que era el hederero natural de Clamparu, y Becu. Clamparu,  alias Cabeza de Cerdo, es considerado como el principal capo del tráfico de mujeres en Europa, al ser condenado en 2012 a 30 años de prisión por obligar a prostituirse a cinco mujeres, una de ellas menor de edad. Para Jose Nieto, Jefe de Inteligencia de la Unidad contra redes e inmigración de la Policia Nacional, Clamparu ha sido' uno de los mayores criminales que ha pasado por España que se benefició explotando a mujeres durante muchos años' .

Estas bandas captaban a sus mujeres por lo general en Rumanía ' tenían claro donde pescar, van buscando a las familias y se benefician de la necesidad ajena. Primero convencen a las familias para que les vean, no como explotadores, sino como salvadores  primero de su hijas y en consecuencia de la familia'. Estas bandas movían miles de euros porque una mujer estaba obligada a mantener 20-25 relaciones sexuales en su jornada laboral de horas horas pagando 20-25 euros; son máquinas muy bien engrasadas de hacer dinero'.

La disputa entre estos bandas llegó a tener artefactos de por medio cuando  en noviembre del año pasado, en Parla, varios miembros pertenecientes a la banda de Dorel intentaron asesinar con una bomba al líder de la banda rival, llamado Baku. El objetivo del ataque era colocar el artefacto en un coche de juguete teledirigido y provocar la muerte del cabecilla rumano. Sin embargo, mientras manipulaban el artefacto, éste explosionó provocando que el individuo encargado de la colocación perdiera una pierna y un testículo.' Estas bandas suelen terminar por la avaricia porque ven que si pueden controlar  5 ó 6 mujeres y el del la otra banda controla más de 10 se preguntan por qué  no lo puedo hacer y seguir acumulando mujeres y poder. Y su avaricia rompe el saco' explica Jose Nieto, máximo responsable de la Unidad contra redes e inmigración de la Policia Nacional.

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