"Hablar sobre los abusos de la Iglesia tiene que dejar de ser tabú"
Hablamos con Miguel Ángel Hurtado. Cuando era adolescente un párroco de Barcelona abusó de él. Ha puesto en marcha una campaña para pedir al arzobispado de Granada que actúe contra los abusadores
Foto del pasado 23 de noviembre. E arzobispo de Granada se postra ante el altar para pedir perdón por los 'escándalos'(EFE)
Madrid
Miguel Ángel Hurtado es psiquiatra, tiene 32 años y fue víctima de abusos a cuando tenía 16. Lo ocurrido en Granada le ha llevado a poner en marcha una iniciativa en Change.org que dice así: "Conferencia Episcopal Española: Rezar no es suficiente. Pide al Arzobispo de Granada que tome inmediatamente medidas contra los abusos a menores".
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'Los abusos sexuales de la Iglesia tienen que dejar de ser tabú
Entrevistado en Hoy por Hoy Miguel reclama una acción de los mandatarios de la Iglesia distinta a la hecha hasta ahora. "El obispo tiene que utilizar sus apariciones para animar a las víctimas a que acudan a la policía, no al arzobispado. Tiene que animar, por todos los medios posibles, a que todos aquellos que tengan conocimiento acudan a la policía", dice Miguel.
Miguel Ángel Hurtado se muestra bastante escéptico con las autoridades eclesiásticas. "El papa Francisco ha tardado bastante en tomar tímidas medidas. Si no lo hacía se arriesgaba a que le estallara después".
La prescripción de este tipo de delitos
Miguel lamenta que este tipo de delitos prescriba en España, algo que no sucede en otros países. “Es una gran frustración. Estoy viviendo en Inglaterra y te das cuenta de que la legislación es distinta. Aquí los delitos de abusos a niños no prescriben. Cuando yo quise denunciar tenía 22 años y mi delito había prescrito un año antes”.
Afortunadamente, dice Miguel, la mentalidad de la sociedad ha ido avanzando bastante en los últimos años. “A mí me pasó en los años 90 y entonces no se hablaba sobre este tema en la sociedad. Noté que había mucho miedo en mi entorno a hablar. Hago siempre la comparación con el cáncer. Había miedo a hablar de abusos sexuales”, dice Miguel. “Noto una diferencia en los últimos 15 años sobre cómo reacciona la gente. Se está perdiendo el miedo de hablar. Hablar de abusos no puede ser un tabú”.
Miguel asegura que no estaba preparado para todo lo que le sucedió cuando un cura abusó de él a los 16 años. “Nadie te previene sobre esto. Cuando eres pequeño te dicen ‘ten cuidado, no hables con extraños’, pero no te dicen que desconfíes de gente de tu entorno, gente que puede manipularte. Eso nadie te lo cuenta”, se lamenta Miguel.
Legislación española
Miguel reclama a los políticos que este tipo de delitos no prescriban y pide también que se eleve la edad legal del consentimiento sexual. “Estamos bastante atrasados. La edad de consentimiento en España, 13 años, es de las más bajas. Estamos empatados con el Vaticano.”
