¿Estofado contra la depresión?

'Cuando no existían los antidepresivos, la gente tomaba estofado'. Así de rotundo es 'The New York Times' en un artículo sobre las propiedades de este plato, que tiene el poder de reanimar el espíritu. Según la periodista gastronómica  Regina Schrambling durante años al estofado se le han atribuido propiedades terapeúticas y ha sido empleado como antidepresivo. No en vano, parece ser que el estofado fue la comida más consumida en Nueva York días después de los atentados a las Torres Gemelas (2001).

Aunque esta teoría no esté demostrada científicamente, está claro que en esta época del año un buen estofado es capaz de reconfortar al comensal más exigente. Mikel Iturriaga  y David de Jorge cuentan en 'Hoy por Hoy' con Gemma Nierga trucos para conseguir el estofado perfecto:

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1. El estofado es mejor cocinarlo siempre de un dia para otro. Los sabores reposan y se ligan mejor.

2. El estofado quiere horas de cocción y fuego lento. Es preferible cocinarlo en una olla tradicional y si optamos por la olla exprés, hay que tener en cuenta que no todos los ingredientes tienen el mismo punto de cocción.

3. Para que la carne no nos quede dura hay que escoger partes como la falda, el morcillo, carrillera, costilla de cerdo o cuello de cordero. Hay que evitar las carnes más limpias y optar por las piezas que tengan más colágeno y músculo. Echar la carne con el agua caliente nos ayudará a que quede más tiena.

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4. Es estofado sin algo de alcohol, no es estofado. El vino tinto, el brandy, el coñac, son los licores perfectos para cocinar este plato. Es importante que reducir el alcohol para que pierda la acidez.

5. La picada, la mostaza e incluso el chocolate son el toque perfecto para potenciar el sabor del estofado.