Telegrama a Sonia Castedo
Miguel Ángel Aguilar dirige su telegrama a la alcaldesa de Alicante, imputada por corrupción.
Señora alcaldesa de Alicante, su resistencia, aferrada a la poltrona del Ayuntamiento, ofrece una imagen de emperramiento penosa. Un mínimo de elegancia política le hubiera debido llevar a la renuncia anticipada, en vez de forzar la foto con el Rey que será inútil como escudo. Tampoco se entiende la tolerancia del Partido Popular, que ha tenido tiempo sobrado de presentar una moción de censura para su relevo. Todas sus declaraciones de estos días confirman la peor de las opiniones y dan la sensación de que Su Señoría se ha puesto Alicante, Génova España por montera.
