Wawrinka ya no es la sombra de Roger Federer
Stanislas Wawrinka es un tenista muy especial. En cuanto le ves jugar te das cuenta. Su maravilloso revés a una mano, su tripilla asomando, su capacidad para complicarse la vida en partidos heroicos, todo ello le ha convertido en algo más que la sombra de Roger Federer, hasta ahora era algo así como su mozo de espadas.
En inicio de curso ya dejó entrever que Stan este año sería más Stan que nunca. En Australia posiblemente jugó uno de los partidos del año, teniendo ganado a Djokovic logró dejarlo escapar vivo y como siempre, despertando la ternura y admiración en todo el público, que desde hace tiempo desea que este jugador consiga un premio que su tenis merece.
De apellido polaco, padre alemán, madre suiza y abuelos checos, Wawrinka refleja a la perfección lo que es Suiza, un país mestizo que durante el último siglo se ha ido nutriendo de inmigrantes trabajadores, la mayoría con ganas de triunfar. Amigo íntimo de Federer, consiguieron hace cinco años su mayor hito juntos, colgándose una emotiva medalla de oro en la modalidad de dobles en Pekín.
Nunca pudieron triunfar en la Davis, frenados por el cargado calendario y las continuas reticencias de Federer para participar en los últimos años. Esa separación obligó a Stan a volar solo, a independizarse. De la mano de Magnus Norman ha logrado esa calma, esa solidez que suele trasmitir el tenis sueco y los resultados han empezado a llegar.
Final en Buenos Aires, semifinales en Casablanca, cuartos en Mónaco y título en Estoril. Una trayectoria envidiable en los últimos meses que se ha visto coronada en Madrid con una semana formidable. Dimitrov, Tsonga y Berdych, posiblemente la ristra de eliminaciones de mayor valor de todo el torneo han sido su camino a la final. Nunca ha ganado a Rafa Nadal, ni siquiera le ha hecho un set en las ocho veces que se han visto.
Sea cual sea el resultado de la final, Wawrinka podrá presumir de algo: el lunes se despertará por delante de Roger Federer en la ‘race’ del año por primera vez en su carrera a estas alturas del curso.
