Rafa Nadal, su lado más irónico
Nadal está harto de que le pregunten por su rodilla, y si no está lo parece. Tanto que el término ‘rodilla’ es a Nadal lo que Bárcenas a Mariano Rajoy. El jugador de Manacor, desde que llegó a Madrid, está desarrollando un sexto sentido para responder de forma creativa y mordaz a las preguntas de la prensa.
Tras su victoria frente a Youzhny en un partido aseado y bastante solvente, el balear ha sacado todo su repertorio ante la prensa. Sobre su maltrecha rodilla, de la que se ha visto quejarse durante algún lance del choque, Nadal ha explicado: “tengo molestias habitualmente, pero hoy no más”. Al hilo de esto, un compañero le ha preguntado si podía explicar cómo funciona la cinta blanca que adorna su rodilla, a lo que el tenista ha respondido que “no sirve para nada de nada” aduciendo que lo hace por seguridad.
Conforme se iban avanzando las preguntas, su retranca ha ido aumentando. Preguntado por las dos advertencias que le ha marcado el árbitro por exceder el tiempo entre saque y saque, Rafa ha asegurado no sentirse señalado, aunque ha comparado sarcásticamente sus castigos con las de los árbitros que" no les dicen nada por no ver una pelota a dos por hora y que va fuera”.
Su tenis, su evolución, también han estado presentes en la zona de prensa. “Con 7 meses sin competir, mejorar solo se puede hacer por la tele, solo se puede con un don divino” ha contestado Rafa a si con las lesiones había adoptado la estrategia de acabar antes los puntos. Pero no todo han sido largas parrafadas y respuestas reposadas, abordado sobre si estará en el Masters de Roma, el propio jugador ha interrumpido al periodista a media pregunta con un certero “sí”, acabando con la tarea del compañero y facilitándole un titular sencillo y corto.
Para el final se ha guardado lo mejor de su fondo de armario. Madrid es el Masters 1000 de tierra que más ganadores ha tenido en estos años. Quizás su altitud, quizás su cambio de superficie, todo ha podido influir en que Nadal no haya establecido en casa la hegemonía que sí tiene fuera. “No existen las casualidades… aquí hice final, campeón, final... y el año pasado no jugamos en tierra" ha sentenciado Nadal entre las carcajadas de los asistentes.
Está tenso Nadal estos días, puede que con Djokovic y Federer fuera del torneo sepa que está ante una opción inmejorable de pegarle un bocado a la distancia que estos le sacan en el ranking. Pero no negaremos que también está gracioso.