Navarra rehabilitará 480 viviendas en 11 barrios considerados vulnerables por su antigüedad o por el perfil socioeconómico de sus inquilinos
El plan de regeneración urbana en barrios pretende acometer la rehabilitación energética de más de 1.600 viviendas de la Comunidad foral
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La ley de rehabilitación energética obligará a adaptar las viviendas(Getty Images)
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Pamplona
El Gobierno de Navarra, a través del departamento de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos, pretende acometer la rehabilitación energética de más de 1.600 viviendas de la Comunidad foral mediante el plan de regeneración urbana en barrios. Así lo ha dado a conocer el consejero José María Aierdi, que ha comparecido junto a la directora general de Vivienda, Ana Bretaña, y el presidente de la Federación Navarra de Municipios y Concejos, Juan Carlos Castillo.
Según ha explicado Aierdi, ya se ha puesto en marcha la primera fase del programa, que ha supuesto la intervención en 480 viviendas. A través de esta iniciativa se establece una línea de ayudas y acompañamiento a las comunidades vecinales en proyectos de rehabilitación energética que forma parte de los 6 programas impulsados por el Ejecutivo foral en estos últimos meses.
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Aierdi, que ha destacado el "fuerte componente social" del proyecto, ha añadido que la primera fase abarca once barrios en diez municipios de Navarra, concretamente "núcleos rurales que llamamos vulnerables". "Esta vulnerabilidad tiene que ver o bien con la antigüedad de los edificios o bien con la vulnerabilidad de las personas que viven en ellos y por lo tanto requieren un esfuerzo en este sentido importante", ha afirmado.
También ha citado tres factores fundamentales del proyecto, como el medioambiental o climatológico "por lo que supone de esa progresiva reducción del consumo energético de los edificios"; la "regeneración del tejido urbano en los espacios públicos como una apuesta decidida por la priorización de la recuperación de esos espacios urbanos frente a apuestas por nuevos desarrollos residenciales"; y la incidencia social "por lo que supone de rehabilitación, en plena crisis de encarecimiento de energía, de ese principio del derecho a una vivienda digna".
"Este es un programa en el que se trabaja en estrecha colaboración con los Ayuntamientos, que han sido quienes han propuesto aquellas zonas que consideran vulnerables dentro de sus propios espacios", ha relatado Aierdi, que ha apuntado que se ha trabajado en edificios de Pamplona, Burlada, Ansoáin, Villava, Tudela, Estella, Tafalla, Lesaka, Lekunberri y Huarte, que suponen una intervención en 480 viviendas en esta primera fase, con unas previsiones de inversión total de unos 15 millones de euros.
Novedades en las convocatorias
Por otro lado, Aierdi ha explicado que el departamento ha modificado otras convocatorias con el fin de incorporar cambios "que permitan incrementar las ayudas de manera importante sobre la convocatoria anterior", e incorporar "correcciones técnicas". Las convocatorias modificadas ya están disponibles para ser solicitadas.
Entre las principales modificaciones, la directora general de Vivienda, Ana Bretaña, ha explicado que "todas las convocatorias de ayudas europeas dirigidas a la rehabilitación energética profunda se han hecho compatibles con las ayudas de Gobierno de Navarra", se han incrementado los topes máximos de ayudas por vivienda, y se han reducido una serie de requisitos técnicos "que habíamos visto que habían dificultado el acceso a las subvenciones", como los vinculados al porcentaje de superficie de uso residencial dentro de las edificaciones. Bretaña lo ha ejemplificado, señalando que si en anteriores convocatorias se exigía que el 70% del edificio se destinara al uso residencial, ahora, se ha pasado a pedir que sea un 25%. Con este fin, se pretende facilitar el acceso a la rehabilitación de aquellas viviendas, sobre todo en zonas rurales, que cuentan, por ejemplo, con anexos destinados a labores agrícolas.