La técnica militar para conciliar el sueño que hará que te duermas en 2 minutos
Son muchas las personas que cuentan con dificultades para conciliar el sueño
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Una mujer duerme con una manta en el sofá / fizkes
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Muchas personas enfrentan dificultades para conciliar el sueño. Ya sea por estrés, ansiedad u otros factores, el insomnio puede tener un impacto significativo en la calidad de vida.
Una técnica que ha ganado popularidad recientemente es la "técnica militar" para dormir rápido. Este método, utilizado originalmente por el ejército de los Estados Unidos, promete ayudar a las personas a conciliar el sueño en cuestión de minutos, incluso en condiciones adversas.
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La técnica militar para dormir rápido fue desarrollada para ayudar a los soldados a descansar en situaciones de alta presión y estrés, como en zonas de guerra. La técnica fue popularizada por primera vez en 1981 en el libro 'Relax and Win: Championship Performance in Whatever You Do' del entrenador físico Lloyd C. "Bud" Winter. Aunque la evidencia científica que respalde su eficacia es limitada, muchos han encontrado útil este método para mejorar su calidad del sueño.
"Es un método que promete inducir el sueño en sólo dos minutos y se basa en la relajación progresiva de diferentes partes del cuerpo y la visualización de escenarios de calma", comenta Marcio Zanini, psiquiatra y médico del sueño.
¿Cómo se realiza la técnica y quién puede realizarla?
La técnica militar es ideal para quienes desean conciliar el sueño más rápidamente o reducir el tiempo que pasan dando vueltas en la cama. Es especialmente útil para personas con agendas ocupadas, estudiantes que llegan tarde a casa e incluso deportistas. Estos son los pasos a seguir para realizar bien dicha técnica:
- Relaja el rostro: Cierra los ojos y respira profundamente. Suelta la tensión de la frente, los párpados, la mandíbula y la lengua. Deja que los músculos del rostro se relajen completamente.
- Relaja los hombros y las manos: Relaja el cuello y los hombros, permitiendo que se hundan en la cama. Luego, relaja los brazos, los bíceps, los antebrazos y las manos.
- Respira y relaja el pecho: Inhala lenta y profundamente, luego exhala soltando toda la tensión acumulada en el pecho.
- Relaja las piernas: Comienza por los muslos, dejándolos pesados. Luego, haz lo mismo con las pantorrillas, los tobillos y los pies, permitiendo que descansen completamente.
- Limpia la mente por 10 segundos: Imagina una escena relajante, como olas en la playa o un cielo estrellado. Si surgen pensamientos, déjalos pasar sin aferrarte a ellos. Si esto no funciona, intenta repetir mentalmente "no pienses".
"La relajación muscular progresiva y la visualización de un escenario tranquilo pueden facilitar la aparición del sueño. Pero aunque la técnica está ampliamente difundida, aún existen pocos estudios científicos rigurosos que demuestren su efectividad a largo plazo y para diferentes grupos poblacionales. La mejor manera de saber si la técnica funciona es probarla durante algunas semanas. Algunos factores pueden dificultar la eficacia de la técnica, como la ansiedad , las preocupaciones excesivas, el insomnio crónico y un entorno de sueño inadecuado", explica Zanini.