La mafia italiana seguía de cerca a Robert de Niro: esto es lo que llegaron a hacer para estar cerca de su ídolo

Madrid

Robert De Niro ha dado vida a alguno de los mafiosos más importantes de la historia del cine moderno. Entre ellos al icónico Vito Corleone en El Padrino II. Un papel para la historia que le permitiría conseguir su primer Oscar como mejor actor de reparto. Un primer galardón al que le seguiría años más tarde una segunda estatuilla por su buen hacer en otro clásico del cine como Toro Salvaje, en la que interpretaba a un joven boxeador italoamericano que quiere ser el número uno en los pesos medios. Una película en la que también estaba muy presente el tema de las mafias y las familias italoamericanas.

Tras el gran éxito de El Padrino II, Robert De Niro comenzó a dar vida a otros gánsteres que también gozaron de una gran popularidad entre el público general. Todo ello gracias a que el actor estadounidense ha sabido darles una personalidad única y muy particular. Un tema sobre el que hemos hablado en el último programa de Sucedió una noche, en el que hemos abordado la gran acogida de todos y cada uno de sus personajes a lo largo de su extensa trayectoria: "Robert de Niro es uno de los primeros rostros que viene a la mente cuando piensas en un mafioso de cine".

"Sus mafiosos gustaban al público"

Y no, no solo por la cantidad de veces que se ha puesto en la piel de un mafioso. También porque ha sido capaz de darles un toque muy personal: "Sus mafiosos siempre destacan por ser elegantes y con estilo". De esta manera, y a pesar de que fueran unos asesinos desalmados, siempre acababan cayéndole bien al espectador: "Sus mafiosos gustaban al público y también a los miembros de la Cosa Nostra, quienes llegaron a hacer cosas inimaginables para estar cerca de su ídolo".

A raíz del éxito de estas películas, algunos de los mafiosos más reconocibles comenzaron a hacer de extras en películas como El Padrino II, Uno de los nuestros o Casino para poder estar así cerca de su ídolo. Así lo contaba el propio Robert de Niro en una entrevista, donde reconocía que había coincidido con varios mafiosos en sus películas: "Había gente por ahí, sí. A todo el mundo le gusta salir en las películas. Y a las personas de este oficio más aún que a la mayoría".

El fichaje de Lenny Montana

Y es que la mafia siempre ha estado muy pendiente de la trilogía. Uno de los ejemplos más claros de ello fue la presencia de Lenny Montana en el set de rodaje. Después de formarse como luchador profesional, Montana ejerció como guardaespaldas de un mafioso enviado por la Liga de Derechos Civiles Italo-Americana y por la familia criminal de Colombo. Todo ello con el objetivo de asegurarse de que no se pronunciase nunca la palabra "mafia" durante toda la película.

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Tras verle por primera vez, Francis Ford Coppola acabó entusiasmado y decidió darle el papel de Luca Brasi en la ficción. Este es probablemente el caso más evidente, pero es que hubo muchos más. Principalmente porque todos querían participar en las películas de este género y estar junto a estrellas del calibre de un Robert de Niro que es considerado una auténtica eminencia.