“Me cuesta hasta contarlo”: Santi Rodríguez se emociona al recordar lo que le dijo una mujer antes de actuar en un pueblo pequeño
El cómico malagueño se ha emocionado al contar lo que pasó
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Es imposible que haya un lugar de España donde no reconozcan la voz de Santi Rodríguez. A lo largo de su carrera profesional como humorista y actor, el malagueño ha quedado en el recuerdo de todos los espectadores con su paso por la pequeña pantalla en '7 vidas' o 'El Club de la Comedia'. Pero su recorrido por los escenarios de teatro también ha sido envidiable. Tras el éxito rotundo de sus montajes 'Espíritu', 'Como en casa de uno' e 'Infarto', Santi regresa con una nueva propuesta, '¿Nos damos un viaje?', que promete hacer reír a carcajadas a los apasionados de viajar.
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El humorista malagueño ha pasado por los micrófonos de Transmite la SER para hablar con Juan Carlos Ortega de su nuevo proyecto. Aunque todavía no tiene fecha de estreno, Rodríguez adelanta que será este verano. Pero más allá de la calidad de su espectáculo, de lo que más se siente orgullo el actor que dio vida a 'El frutero' en '7 vidas', es de recuperar una tradición que reconoce a muchos artistas "les da alergia". "Es un grave error", le decía a Ortega.
"Se me hace el nudo"
Y es que uno de los principales propósitos del cómico es volver a llevar el entretenimiento a los pueblos más pequeños de España, donde asegura te reciben como "el puñetero amo". Santi cuenta que estuvo actuando en Benatae, un pueblo que no alcanza los 500 habitantes, pero se sintió "como si estuviera actuando en Barcelona y dos millones de personas". La generosidad de los vecinos fue tal, que el humorista reconoce que se fue de allí "lleno de leche, aceite, embutidos, cariño y abrazos".
Pero lo más emocionante lo vivió en otro pueblo, del que no ha dado el nombre, donde tuvo el placer de conocer a una seguidora que le quedan pocos meses de vida. "Me cuesta hasta contarlo porque se me hace el nudo", reconocía, visiblemente emocionado. La hija de la mujer enferma le confesó al cómico cómo su madre se había ido a la peluquería y al pueblo de al lado para comprarse un vestido porque "hoy es la primera vez que va al teatro".
