"Es acoso sexual y deshumanización": el incidente en los Mundiales de Atletismo Indoor que ha escandalizado a los atletas

Los Mundiales de Atletismo en pista cubierta han quedado bajo lupa desde antes incluso de su celebración. La competición, que se desarrolla en la ciudad china de Nankin entre el viernes y el domingo de esta semana, ha sido epicentro de una polémica sexual que ha puesto en el foco la seguridad de los competidores. Quien ha alzado la voz ha sido el estadounidense Grant Holloway, una de las estrellas de la semana que ostenta, entre otros, el título de campeón olímpico en 110m vallas.

El corredor ha recibido multitud de muestras de apoyo desde que contase en sus redes sociales el altercado con un aficionado ante el que no supo cómo reaccionar. En sus palabras, incluso, trató de comprender el incidente apoyándose en las diferencias culturales con China: "Creo que la cultura china es genial, pero tienen un concepto diferente del espacio personal. Un hombre me tocó el trasero mientras nos tomábamos una foto y comentó: 'Mmmm muy musculoso'".

El propio Holloway admitió cómo se vio atenazado ante tal circunstancia, aunque no quiso que este episodio pasase desapercibido. "No supe qué responder, así que me quedé paralizado", comentó, tratando de asumir este capítulo con cierta filosofía para considerarlo "un cumplido".

Un aluvión de reacciones se sucedió en adelante. Y aunque en un principio los comentarios alternaron sentimientos de incredulidad, indignación e incluso risa, el alegato del atleta más reconocido del equipo estadounidense pasó por encima del resto. "No, eso es acoso sexual y deshumanización", respondió el mismísimo Noah Lyles, también campeón olímpico aunque en los 100m lisos, tirando abajo la teoría de un supuesto choque cultural.