De Frutos muestra su idilio con Vallecas: "Es como estar en mi pueblo"

El Rayo Vallecano afronta el parón de selecciones de marzo mucho más tranquilo de lo que se podía prever antes del inicio de curso. Con los deberes de la permanencia casi finiquitados, los franjirrojos sueñan con hacer de esta pausa el punto de inflexión definitivo que catapulte sus ambiciones hacia una clasificación europea todavía tabú. El mensaje de su entrenador, Íñigo Pérez, ha calado profundamente en su vestuario y Jorge de Frutos, protagonista de este jueves en SER Deportivos, da buena cuenta de ello.

El extremo rayista aprovecha la semana sin fútbol en Primera División para "desconectar" como pocas veces en la temporada. Aun así, no pierde el foco de un Deportivo Alavés que la próxima semana medirá hasta dónde llegan sus ambiciones.

De Frutos se ha convertido en una pieza fundamental para el esquema del Rayo Vallecano, donde regresó en 2023 tres después de una primera etapa donde ya dejó destellos de hasta donde podía elevar su nivel. "En 2020 llegué después de una etapa en el Real Valladolid en la que no jugaba nada. Aquí desde el primer momento me acogieron muy bien, siempre he estado muy a gusto en el vestuario", se congratuló, consciente de que es esta campaña cuando está desplegando su mejor juego: "He vuelto con mucha más experiencia y muchos mas partidos, que es lo que te hace coger esa fuerza dentro del campo".

Íñigo Pérez, clave para ver al mejor De Frutos

Este crecimiento, eso sí, tiene detrás la mano de Íñigo Pérez: "Cuando llegó a mediados de la temporada pasada se reunión con cada uno individualmente y conmigo me dijo que quería volver a ver a ese Jorge de Frutos del Levante, que confiaba mucho en mí y tenía que trabajar para ello". "Aunque terminó la temporada un poco regular porque nos quedamos justo encima del descenso, se asentaron las bases", comentó De Frutos, antes de ahondar en unas posibilidades europeas de las que su entrenador no quiere ni hablar.

"Tenemos los pies en la tierra", admitió, en línea con las palabras vertidas insistentemente por el técnico rayista. "El objetivo principal de un club como el Rayo Vallecano es la salvación. Lo tenemos cerquita, estamos haciendo una buena temporada y, una vez pasemos esa línea, ya empezaremos a hablar de cosas mayores", prometió. "La esencia de este equipo es que compite siempre. Estamos haciendo una gran campaña. El míster ha conseguido tenernos a todos enchufados, que creamos en lo que él nos estaba transmitiendo, y se ve dentro del campo. Vamos todos a una, no damos un balón por perdido y es lo que nos ha llevado a estar donde estamos. Es lo que tenemos que hacer en los partidos que nos quedan de Liga", alegó, en busca de no descolgarse de la clasificación liguera.

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Para De Frutos, los años en la élite no han terminado de desviar su atención de su pueblo, Navares de Enmedio (Segovia), donde su familia todavía ostenta un bar. La vida allí es la que le hace disfrutar también de un club atípico en Primera como el Rayo: "Vallecas es un barrio. La cercanía que tenemos los jugadores con la afición... Puedes pasear por Vallecas, sales de entrenar del estadio y la gente te saluda... Es como estar en mi pueblo", reconoció, encantado con su vida en Madrid.