Pedri es un diésel: el 'acelera-para' de años anteriores es lo que le rompe

El Barça mostró en Lisboa una nueva versión ante el mundo: jugó con un jugador menos más de una hora —tras la expulsión de Cubarsí—, fue capaz de detener todas las acometidas del Benfica y aprovechó su oportunidad para firmar el 0-1 que le hace fuerte para la vuelta en Barcelona. Szczesny se convirtió en héroe con ocho paradas y Raphinha hizo de estrella... pero quien se llevó el MVP del partido fue Pedri. Dirigió a los azulgrana sobre el césped y recorrió 14 kilómetros en los 90 minutos. Unas cifras que invitan a pensar que el canario descansará este sábado ante Osasuna, aunque desde el club parecen haber dado con la tecla para evitar las lesiones que tanto le han atormentado en pasadas temporadas. Algo ha cambiado en Pedri. A sus 22 años ha pasado de jugar absolutamente todos los minutos hasta tropezar una y otra vez en problemas musculares que impidieron ver brillar su fútbol. En este curso eso no pasa, y en parte es por la conclusión a la que los preparadores físicos del Barça han llegado. Tal y como desvela Sique Rodríguez en «El Bar», el centrocampista azulgrana es una especie de diésel que necesita jugar. «Evidentemente hay que darle descanso pero eso que hacía en Barça en otras temporadas de que jugara dos partidos sí, uno no, quitarlo media hora de terminar el partido... no es bueno por su físico», explica. Por ello, en el Barcelona han descubierto que es mejor que Pedri juegue 70-80 minutos cada partido y vaya haciendo físico a que descanse: es un diésel que si acelera-para, acelera-para y acelera-para es cuando se rompe. El jugador del Barça, que a cada partido que pasa está haciendo méritos para meterse en esa lucha por el Balón de Oro donde también sitúan a sus compañeros Raphinha y Lamine Yamal, tampoco corre sin sentido. Eso 14 kilómetros, aunque sean una pasada para un centrocampista, están justificados. «No es una cabra loca», señala Bojan Krkic. Recupera donde hay que recuperar, cuando tiene el balón lo conduce, cuando tiene que soltarlo lo suelta y cuando tiene que dar un taconazo, como el de este miércoles, lo hace porque descongestiona el juego. También hace coberturas a todo el mundo. El desgaste es brutal, pero ya no le pasa factura como hace unos años cuando recaída en lesiones musculares por jugar todos los minutos con el Barça y la Selección y quedarse sin vacaciones. Sin embargo, Moises Hurtado, exjugador y invitado especial en «El bar de Sique Rodríguez», lanza el aviso de que al final de la primera vuelta se notó que jugadores como Pedri o Raphinha, que es más explosivo, se fueron quedando sin energía. «Son jugadores de un tremendo desgaste físico. Muchos partidos de 14 kilómetros... luego tienes que llegar a final de temporada que es cuando te juegas las castañas», añade. La clave es saber dosificar de la mejor manera a un Pedri que actualmente es uno de los jugadores más importantes para Flick. No jugar en la siguiente jornada de Liga no significa que vaya a parar, de hecho, el próximo martes se juega la vuelta contra el Benfica, y la plantilla necesita a un Pedri lo más óptimo posible para, paradójicamente, recargar energías. «Hace muchísimos esfuerzos para luego ser tan fiable con la pelota, pero la mayoría de acciones que hace en conducciones no son porque él se ve apurado, es porque da descanso al resto. Es decir, todo el partido le pasa por la cabeza lo que va a necesitar el equipo. Todas las acciones tienen una repercusión en qué es lo que necesita mi compañero, si me la tengo que quedar para que descanse o para que no le ponga en problemas con el pase. Es un futbolista extraordinario en la lectura de juego. El desgaste que hace tiene todo el sentido todas las veces. Aunque a veces él no quiera o le vaya bien jugar... creo que hay momentos para todo», continúa el también exfutbolista Jofre Mateu. Pedri tiene esa capacidad de hacer balsa de aceite, marejadilla y maremoto... pero ese desgaste de más que el canario pudo sufrir en el Estadio da Luz puede estar influenciado por que hay otro que no corre. Javier Galiano, habitual colaborador del programa, apuntó a Frenkie De Jong. «Esto es como un coche, pero si el motor hace ruido hay que llevarlo al taller. Creo que el Barça con De Jong tiene un problema. Es el roto que tiene ahora mismo el equipo», explica. El neerlandés, que ha ido ganándose poco a poco la confianza de Flick en este tramo de temporada, llegando a sentar a un Casadó que había sido capital en la primera vuelta, tiene un problema: no es un futbolista de corte defensivo aunque tenga capacidad de corrección defensiva. Tanto Jofre como Moises subrayan su «falta de responsabilidad» en esa labor y que no tiene ese nervio necesario para saber parar jugadas rivales con un agarrón o una entrada. De hecho, Bojan Krkic padre, anteriormente dentro de la directiva del club culé, recuerda una advertencia que hizo antes de fichar al ahora capitán del Barça. Fui con José Mari Bakero a un partido del Ajax. De Jong jugaba de central porque puede hacerlo en un partido sin mucha exigencia. Cogió un balón desde su área, llegó al otro área y dio un pase de gol, que incluso él podía tirar, y dije... «es peligroso firmarle por mucho que haya hecho esta jugada». Era una detrás de otra. Estaba acostumbrado a jugar así. Tenía un Ajax adaptado a él, con Van de Beek casi sin balón jugaba, que entraba de segunda línea, con un pivote fijo y él al lado. Está mal acostumbrado«, señala. Ha acertado con la oportunidad a Szczesny, también con la armonía que existe entre todos los jugadores, pero ahora habrá que ver cómo Flick ataja esta situación si no quiere que en los próximos meses las piernas de Pedri, el futbolista por el que todo pasa, se queden sin combustible.

Pedri es un diésel: el 'acelera-para' de años anteriores es lo que le rompe

Los servicios médicos del Barça aconsejan al canario, que corrió 14 kilómetros en Lisboa, no parar para no recaer en lesiones musculares

Íñigo Renedo

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