Héctor de Miguel, sobre las palabras del juez Valle: "No es lo mismo burlarse de los opresores que incitar a la violencia contra los oprimidos"

Madrid

La Cadena SER ha publicado este jueves las declaraciones del juez Valle durante el interrogatorio a Héctor de Miguel, director de Hora Veintipico, sobre el chiste que realizó en su programa sobre el Valle de los Caídos. El magistrado realizó una comparación de esta broma con esta frase literal: "Por ejemplo, imagínese usted: a ver si volamos la plaza de Pedro Zerolo. A ver si le parece, aunque sea en un programa de humor, que se dijera: 'Vamos a ver si volamos la plaza de Pedro Zerolo, y con las piedrecitas, llegamos el día del Orgullo y se las tiramos a los que estén allí, homosexuales, que hayan abusado de niños. Es decir, todos los homosexuales". Tras esas palabras, de Miguel se ha pronunciado en su programa.

"Para el juez Valle es lo mismo un símbolo del franquismo, un régimen que persiguió, torturó y asesinó a miles de personas, también homosexuales, que una plaza dedicada a alguien que luchó por los derechos del colectivo", ha comenzado. También ha querido resaltar lo que, para él, ha sido un mensaje premeditado: "Me lo imagino la tarde de antes tomándose un cognac, haciendo una videollamada con el juez Carretero y el juez Peinado, lo más parecido a un podcast que hace esta gente, y pensando: 'Con qué podría yo compararle el Valle de los Caídos a este rojazo para dejarle sin palabras… Paracuellos, no muy flojo… La sede del PSOE en Ferraz… No, que en la calle suelen estar los nuestros… El edificio de la cadena SER… No, que ahí está el primark y ahí me hago yo las togas a medida…' Y de repente: '¡Lo tengo!” La plaza de Pedro Zerolo'.

No obstante, de Miguel ha querido analizar las palabras del juez también como un potencial chiste: "Como idea es arriesgada. Si el día del orgullo vas al desfile a apedrear a homosexuales pederastas a algún cura le das, fijo. Y como chiste es flojo y de mal gusto, parece que lo haya escrito uno de mis guionistas". También, por si existían dudas, ha explicado el chiste por el que el director de Hora Veintipico ha llegado a esta situación: "Yo hice una burla hacia Abogados Cristianos en mi programa de humor. Es una crítica a varias estructuras opresoras. Su broma, señor juez, es una muestra de cómo en un juzgado usted toma partido por la posición que la Iglesia ha mantenido durante décadas: proteger a los abusadores en lugar de a las víctimas. Y no es lo mismo burlarse de los opresores que incitar a la violencia contra los oprimidos".

Por supuesto, de Miguel ha querido dirigirse al juez Valle: "Si usted no ve la diferencia entre su broma y la mía, quizá debería replantearse su profesión. Porque la justicia no es solo aplicar normas, sino entender el contexto y el impacto de las palabras y las acciones. Su chiste, señor juez, no tiene ni puta gracia, pero por mí puede decir usted lo que quiera. Yo, a diferencia de algunos jueces, creo profundamente en la libertad de expresión. Y esa libertad también ampara su mal gusto. Mire, al final, nos vamos a librar los dos porque el mal gusto no es delito".

Por último, se ha dirigido a su audiencia y, en especial, ha hecho alusión a su recién nacida sobrina: "Hace falta algo más que una lunática y un juez nostálgico para callarme. Mucha gente que me quiere, incluida mi madre, me aconseja que no insista más, pero, madre, yo no quiero que Nora, tu nieta, mi sobrina, que nació hace 20 días, crezca en un país en el que no pueda decir lo que piensa, o bromear con lo que le dé la gana por miedo. Yo quiero para ella un país libre y mejor. Yo quiero para ella lo que quería Pedro Zerolo".

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