La prensa británica sitúa a esta ciudad costera de Europa como el rival turístico de España para este verano
Varna, localidad costera de Bulgaria, cuenta con playas de aguas cristalinas frente al mar Negro y ha sido elegida como uno de los 52 lugares para visitar en 2025
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La costa de Varna, Bulgaria
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España es uno de los destinos vacacionales más visitados cada año por millones de turistas procedentes de todas partes del mundo. Entre las nacionalidades de los principales visitantes extranjeros destacan los alemanes y los británicos, siendo estos últimos los más frecuentes debido al clima, el ocio, la cultura y la gastronomía que se encuentra en nuestro país.
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Sin embargo, según un artículo publicado por el medio británico The Mirror, el número de turistas británicos en España podría descender este año debido a otro destino turístico europeo que se ha puesto de moda. En concreto, se trata de la ciudad costera de Varna, en Bulgaria.
Alrededor de dos millones de turistas acuden a la ciudad búlgara al año para disfrutar de arquitectura diversa con influencias de los estilos europeo, bizantino, árabe, morisco, armenio y egipcio, y sus playas de arena dorada situadas en el mar Negro.
Varna ha sido elegida como uno de los 52 lugares para visitar en 2025, según la prestigiosa lista de The New York Times, y ya le disputa el puesto a ciudades españolas como Mallorca y Menorca.
Accesible en avión y asequible en precios
Para el público británico, Varna es un destino bastante asequible debido al bajo coste que supone obtener una residencia temporal y lo poco que cuesta comer al día. Los vuelos desde Londres son directos, lo cual hace más cómodo el viaje a los turistas británicos que no quieren afrontar vuelos largos.
La gastronomía local es accesible y asequible, con platos que cuestan alrededor de 8,50 euros, y donde destacan desde las famosas albóndigas búlgaras hasta sus deliciosos risottos y ensaladas frescas, y una pinta de cerveza local cuesta solo 1,50. En comparación con la mayoría de los países europeos, los mercados de comida callejera y los restaurantes locales de Varna son más económicos sin perder calidad.
Una costa frente al mar Negro
La costa búlgara del mar Negro constituye la frontera oriental del país y se extiende a lo largo de 378 km desde el norte de Dobruja, en Rumanía, hasta el este de Tracia, en Turquía. Cuenta con más de 230 playas, bahías y estuarios con aguas cristalinas y playas de arena dorada.
Las playas son aptas tanto para nadadores experimentados como para familias con niños pequeños, y los visitantes pueden disfrutar de actividades como windsurf, kayak de mar y buceo.