Una mujer da a luz a un embrión que se le implantó erróneamente y comienza una batalla legal por su custodia: "Nunca me recuperaré"
Krystena Murray ya ha demandado a la clínica de fertilidad por implantarle el embrión de otra pareja. Tras varios meses criándolo, los padres biológicos reclamaron la custodia y el bebé se fue con ellos
Una mujer cambia el pañal de un bebé, en una imagen de archivo. / NickyLloyd
Madrid
Una mujer ha demandado este martes a una clínica de fertilidad, que se confundió a la hora de implantarle el embrión. Su nombre es Krystena Murray, una joven fotógrafa de Savannah, Georgia, que decidió ser madre soltera y ha terminado en una batalla legal por la custodia de un niño que no era suyo. "Entré con un hijo al que amaba y salí con el cochecito vacío", ha expresado.
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Los hechos tuvieron lugar en 2023, cuando Murray acudió a la clínica Coastal Fertility Specialists, para comenzar el proceso de implante de un embrión, pues quería quedarse embarazada. Ella pidió un donante de esperma con características parecidas a las suyas: buscaba a un hombre de tez clara, pelo rubio y ojos claros. Su sorpresa llegó nueve meses después, cuando dio a luz a un bebé que nada tenía que ver con los rasgos físicos que había pedido.
"Sabía que algo iba mal", ha señalado la mujer en entrevistas con los medios locales. Y es que el bebé que había traído al mundo tenía la piel muy oscura y no compartía ningún parecido con lo que ella esperaba. A pesar de todo, Murray se hizo cargo del niño durante meses, cuidándole sin importar su aspecto, aunque sin dejar a su familia y amigos que lo viesen. "Aquellos meses estuvieron llenos de ansiedad para esta madre primeriza", ha señalado su abogado Adam Wolf.
No fue hasta finales de enero de 2024 cuando la madre le hizo una prueba de ADN al pequeño, comprobando, efectivamente, que no era suyo. Ante esta situación, Murray acudió de nuevo a la clínica de fertilidad para informar del error que habían cometido nueve meses antes, al implantarle el embrión de otra pareja, según se ha desprendido de la demanda impuesta por la mujer.
Comienza la batalla legal por la custodia del niño
La historia de esta madre y el pequeño no acaba aquí. Y es que después de ir a la clínica a pedir explicaciones de lo sucedido, el centro se puso en contacto con los padres biológicos del bebé, que rápidamente demandaron a Murray y pidieron la custodia de su hijo. Con ello se inició una batalla legal de la que la fotógrafa aún no se ha recuperado.
El proceso judicial comenzó en febrero, cuando la mujer contactó con un equipo de abogados para obtener la custodia total del pequeño, con el que ya había creado un bonito vínculo y al que quería desesperadamente, según se ha desprendido del escrito contra la clínica de fertilidad. Al parecer, y ante las altas probabilidades de que perdiese la batalla legal, los magistrados recomendaron a Murray que no continuase con el litigio.
Así fue. En mayo de 2024 Krystena Murray entregó voluntariamente al pequeño a la pareja. "Llevar a un bebé, enamorarse de él, darlo a luz y construir un vínculo único entre madre e hijo, para que luego te lo arrebaten. Nunca me recuperaré de esto", ha expresado, visiblemente emocionada la mujer. "Entré con hijo que me amaba y salí con el cochecito vacío. Ellos se fueron con mi bebé", ha continuado.
Murray demanda a la clínica de fertilidad
Ahora, Murray ha demandado a la clínica de fertilidad, a quien ha acusado de negligencia, al implantarle un embrión de un bebé que no era el suyo. Según se ha desprendido del atestado, la fotógrafa busca que se celebre un juicio, además de una compensación de 75.000 dólares (unos 71.680 euros) por todos los actos acontecidos.
"La señorita Murray ha incurrido en daños especiales, incluyendo pasados y futuros gastos médicos, como resultado directo de la negligencia de los acusados", ha señalado la demanda, al tiempo que ha incidido en "el daño, sufrimiento, angustia, pérdida de la capacidad de disfrute de la vida y otros daños" que "la señorita Murray ha soportado y seguirá soportando" a causa de la clínica Coastal Fertility Specialists.
Todos estos meses después, Murray no ha vuelto a ver al pequeño, que vive en otro estado con sus padres biológicos. De hecho, la pareja adquirió la custodia completa y le cambió el nombre al pequeño después de este incidente. Mientras, ella continúa tratando de hacer justicia por aquel error que tuvo la clínica hace ya casi dos años.
