Jenni Hermoso también recurrirá la sentencia del caso Rubiales
El expresidente de la RFEF ha sido condenado a pagar 10.800 euros de multa por agresión sexual, siendo absuelto del delito de coacciones
La futbolista Jenni Hermoso a su llegada a la Audiencia Nacional de San Fernando de Henares a declarar por el juicio a Luis Rubiales. / Fernando Villar (EFE)
Madrid
La Audiencia Nacional ha sentenciado este jueves una condena mínima a Luis Rubiales por agresión sexual por el beso a la futbolista Jenni Hermoso, absolviendo al expresidente de la RFEF del delito de coacciones. El juez José Manuel Fernández Prieto solo condena a Rubiales al pago de una multa de 10.800 euros, además de la prohibición de acercarse a Hermoso en un radio de 200 metros y comunicarse con ella durante un año. Tanto Jenni Hermoso como Luis Rubiales han anunciado que recurirrán la sentencia, un veredicto que no ha gustado a ninguna de las partes.
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El juez que ha llevado el caso, José Manuel Fernández Prieto, no considera probado que Rubiales y el resto de coacusados presionasen con la suficiente "violencia e intimidación" a la víctima para que justificase públicamente el beso robado durante la ceremonia de entrega de medallas del Mundial femenino de fútbol. Por lo tanto, tanto el exseleccionador Jorge Vilda, el exresponsable de marketing de la RFEF, Rubén Rivera, y su exdirector deportivo, Albert Luque, han sido absueltos del delito de coacciones.
Rubiales, por tanto, se libra de una condena de cárcel porque Jenni Hermoso no salió llorando en un rincón o arrastrando por los suelos su cabello después de aquel beso no consentido. Que la futbolista apareciera en los vídeos celebrando el Mundial tras el beso ha sido determinante para el juez a la hora de sentenciar la condena más baja posible para el expresidente de la RFEF. Además, ha considerado que Rubiales no se prevalió de la superioridad de su cargo para el beso, que se debió a un momento de euforia.
El juez da absoluta credibilidad a Jenni Hermoso y eso demuestra para el juez que su voluntad no quedo anulada, por ello impone la condena mínima. Dice el magistrado que queda probado que Rubiales besó en los labios a la jugadora sin su consentimiento, que la presionó para que justificara públicamente el beso, que Vilda y Luque la hostigaron con ese objetivo, que Vilda le dijo a su hermano que a la futbolista le quedaba poco en el fútbol y que si defendía a Rubiales la RFEF podía tener una deferencia con ella o que no le iba a ir bien en caso contrario.
También da como probado el hecho de que Luque le dijo a una amiga de Hermoso que Rubiales sabía devolver favores y no le iba a faltar trabajo ni a ella ni a la jugadora. También considera probadas las presiones del cuarto acusado, Ruben Rivera, durante las vacaciones en Ibiza. Aún así, Prieto no cree que las presiones alcanzaran la violencia o intimidación necesarias para aplicar este tipo penal.
Esta sentencia no ha gustado a ninguna de las partes. La fiscalía, con toda probabilidad, va a recurrir, pero no lo ha anunciado oficialmente. Tanto Jenni Hermoso como Luis Rubiales han anunciado que la apelarán tambien. Por su parte, María José López, abogada de AFE en acusación popular, ha afirmado en El Larguero que recurrirán la sentencia y que no comparten la opinión del juez de que no hubo intimidación ni violencia en las coacciones de Rubiales y el resto de sus colaboradores de la RFEF.
