Mourinho tira de ironía para responder a las críticas de Icardi: "No puedo comentar las palabras de alguien tan grande"

Son días de piques en el fútbol turco. Después de la polémica victoria del Galatasaray este fin de semana, con gol de Morata y retirada del campo del equipo rival por culpa de la actuación arbitral, Mourinho e Icardi protagonizan estos días un intercambio de declaraciones que el portugués ha querido cerrar esta tarde en rueda de prensa. El técnico ha comparecido en la rueda de prensa previa al partido de su Fenerbahce ante el Anderletch y ha tirado de su ironía habitual para responder a las críticas del jugador argentino, que lo acusó de ser 'crying one', en vez de 'special one', en un post de sus redes sociales.

La polémica empezó cuando el entrenador portugués comentó en una imagen en la que aparecía el impacto del balón con la mano de Davilson Sánchez, del Galatasary, en un partido reciente. “Mi Portugal llegó de manera excelente a las semifinales del Mundial de balonmano, que finalizó el pasado domingo, y me gustaría felicitarles por este éxito y por el impacto que tendrán en la juventud de nuestro país”, ironizaba Mourinho en su comentario por la mano no pitada. Icardi, que milita en el Galatasaray, no dudó en responder con la imagen de un libro ficticio, titulado 'Crying one' como ironía al apodo de Mourinho, 'Special one'. Basicamente, lo acusaba de llorón.

Después de este cruce de comentarios, la pregunta se ha hecho evidente en la rueda de prensa del partido. Y Mourinho, en vez de rebajarse o de esquivar el tema, ha entrado al trapo con su ironía habitual. "Muestro que soy 'special one', que no 'THE special one', con 25 años de carrera y con 26 títulos, no con un partido", sacaba pecho Mourinho de su experiencian aprovechando la ocasión. "No hay partido para definir mi carrera, mi carrera son 25 años. Sobre los comentarios de Icardi... Icardi es una 'cabra' (GOAT, 'mejor de todos los tiempos' en inglés), no puedo comentar las palabras de uno de los mejores. Es demasiado grande, no comento. Callo y acepto".

La misma cara del entrenador luso era suficiente para entender que le estaba devolviendo el golpe velado al jugador argentino. El fin de semana ha estado cargado de polémica en el fútbol turco por el último partido del Galatasaray. Morata marcó su primer gol en su nuevo equipo, de penalti, pero el Adana Demirspor se retiró del campo pocos minutos después por considerar que el trato arbitral era desigual. En efecto, la acción en la que se señaló el penalti era claramente una simulación del delantero del Galatasaray, pero ni el árbitro de campo ni el VAR evitaron que se lanzara la pena máxima.