La prensa portuguesa dice que los españoles no queremos ni Oporto ni Lisboa: este es el pueblo que nos vuelve locos
La villa portuguesa también es conocida por atraer a numerosas aves migratorias, dejando una estampa incomparable
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Alcochete, Portugal: the old town skyline - town center waterfront on the Tagus river - boats and pier / mtcurado
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Tanto por cercanía como por cultural, Portugal es un destino muy deseado por los españoles. Y no es para menos, porque el país vecino ofrece un amplio abanico de opciones turísticas. Sus baldosas, sus calles estrechas, sus murales y ofertas culturales, su rica gastronomía y sus playas son algunas de las características de Portugal que atraen a millones de ciudadanos de todo el mundo que visitan el país luso.
Pero a unos 36 kilómetros de la capital, se encuentra una pequeña localidad de menos de 20.000 habitantes. Situada al otro lado del famoso puente Vasco de Gama, que durante años fue considerado el más largo de Europa, Alcochete linda con la Reserva Natural del Estuario del Tajo.
Además de a los turistas, esta villa portuguesa no atrae solo a visitantes humanos. Cada año, miles de flamencos escogen esta pequeña localidad para hacer una parada en su ruta migratoria hacia el continente africano. Su presencia genera una estampada incomparable, donde el rosa de su pelaje contraste con el azul y el verde de las marismas de la zona y el blanco de las salinas. La belleza de sus calles y de sus paisajes te harán sentir como un rey, igual que a Manuel I de Portugal, nacido en Alcochete, y apodado como el Venturoso o Bem-Aventurado.
Cómo disfrutar de Alcochete
Las históricas calles de Alcochete trazan los orígenes de la zona, con estrechos caminos y coloridas casas que guardan un legado de tradición. Cada una de las puertas de las coloridas casas corresponde a las viviendas de los vecinos, dedicados a la pesca, la extracción de sal o el transporte. La mejor manera de conocer la ciudad es, sin duda, con un paseo recorriendo los rincones más recónditos, con sus pequeños comercios y locales tradicionales.
La gastronomía es uno de los grandes atractivos de este pequeño pueblo portugués. Para los más amantes de la comida, el Mercado de Alcochete ofrece una amplia variedad de puestos llenos de sabores y aromas, con lo mejor de los productos frescos y regionales. Allí, los visitantes podrán de sumirse en el bullicio de los comerciantes, empapándose de la cultura de la ciudad y sus gentes.
La sal es otra de las marcas personales de la villa portuguesa. Durante mucho tiempo, fue considerada el centro de producción de sal más importante de Portugal, siendo la extracción y producción de este condimento una de las principales actividades económicas de la región. Además de mantener viva la tradición de Alcochete, las salinas son cada vez más reconocidas por su importancia ecológica, dando cobijo a numerosas aves acuáticas.