Trabajar con la crispación: así es el día a día de la Defensora del lector en El País
Soledad Alcaide ha relatado en A vivir cómo son las cartas que recibe por parte de los lectores
Información libre de edadismo y el papel del defensor del lector
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La figura del Defensor del lector cobra una mayor importancia en tiempos de polarización. La Organización Internacional de Defensores está compuesta por más de 80 miembros de diferentes medios cuyo trabajo es explicar cuáles son los principios profesionales que dictan el trabajo de una redacción.
Soledad Alcaide es la Defensora del lector de El País y ha pasado por A vivir para contar cómo es su día a día en el periódico. "Me encanta hacer de reportera de la redacción y hablar con la gente de por qué hace esto", comenta. Por otro lado, añade que "escriben más hombres que mujeres. Las lectoras que me escriben es porque han sido atacadas por algo".
El volumen de cartas y las quejas marcan el día a día de Alcaide. Al ser preguntada por el perfil de la gente que escribe comentaba que no puede saber la edad, pero sí lo puede deducir "por la forma de dirigirse". Los lectores que más escriben son aquellos que llevan muchos años leyendo el periódico.
"Recibo muchas cartas de lectores sobre por qué el sistema de moderación les ha borrado el mensaje. Generalmente es porque ese lector ha insultado a alguien. Los foros tienen unas normas de participación. Casi siempre me responden diciendo que estamos coartado su libertad de expresión", afirma Alcaide en relación a las quejas que recibe por la moderación de los debates que surgen en las piezas del periódico.
La crispación es otra de las cuestiones que Alcaide tiene que gestionar diariamente. "El grado de agresividad te agota. Cuando decidimos que solo podían comentar los suscriptores la toxicidad bajó. Nuestra conversación pública tiene tanta carga que es difícil bajar el nivel de agresividad", comenta.
