Las exigencias de Trump en relación al gasto en Defensa apuntan a España, Italia o Portugal

Buena parte de los países de la OTAN se han tomado con calma los objetivos de gasto en Defensa que acordaron en la Cumbre de Gales en 2014. Entonces fijaron que para 2024 esa inversión debía llegar al 2% del Producto Interior Bruto, pero en muchos casos no se ha alcanzado ese objetivo ni siquiera con la presión de la invasión de Ucrania iniciada en 2022.

Una presión que ahora cobra una nueva dimensión con la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca, ya que en su intervención este jueves en el Foro de Davos ha pedido directamente que ese porcentaje llegue al 5% del PIB de los países miembros. Una exigencia que están muy lejos de cumplir algunos países, España entre ellos.

De hecho, España está a la cola en cuanto a la inversión en Defensa, que se sitúa en el 1,28% del PIB. Por debajo del 2% están también países como Italia (1,49%), Portugal (1,55%) o Canadá (1,37%). A día de hoy nadie llega al 5%, aunque ya hay países que pretenden alcanzar ese porcentaje e incluso llegar el 6%, como ha anunciado el gobierno de Lituania esta misma semana.

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Más gasto cuanto más cerca de Rusia

El caso de Lituania es un ejemplo de cómo los países de la OTAN más cercanos a Rusia son los que más están haciendo por cumplir con estas demandas de aumento del gasto en Defensa que lideran Trump y Rutte. Polonia está a la cabeza del gasto en términos porcentuales (4,1% de su PIB), mientras que Estonia y Letonia se sitúan por encima del 3%.

También Estados Unidos, que ahora aumentará aún más ese gasto con toda probabilidad durante el segundo mandato de Trump.

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Desde la Cumbre de Gales de 2014, Letonia y Lituania han aumentado su gasto en Defensa un 300%, y Hungría un 255%. En términos absolutos, el gasto de Estados Unidos supone dos tercios del total de la inversión de los países de la OTAN, seguida de Alemania y del Reino Unido.