"Quienes evalúan a los científicos son la gente que sabe, no los tuiteros": Pere Estupinyà alerta sobre el auge de la desinformación científica
El bioquímico y divulgador científico recibe el Premio CSIC-Fundación BBVA por su destacada trayectoria acercando la ciencia a todos los públicos con rigor e innovación
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La Ventana a las 16h | Entrevista a Pere Estupinyà
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Madrid
En 1871, Charles Darwin escribió en la introducción de su libro El origen del hombre: «La ignorancia genera confianza más frecuentemente que el conocimiento». Esta afirmación ha sido corroborada por la ciencia. Es lo que se conoce como el 'efecto Dunning Kruguer': un sesgo cognitivo por el cual las personas que menos saben acerca de una materia se consideran expertas en esa cuestión, con la capacidad de defenderla con una rotundidad aplastante precisamente porque no son conscientes de su ignorancia. Pere Estupinyà, bioquímico, divulgador científico y reciente galardonado con el Premio CSIC-Fundación BBVA, ha dedicado su vida a combatir este fenómeno con un lema que lo guía: «Escuchar a gente inteligente nos hace más inteligentes».
Estupinyà ha ganado reconocimiento por introducir nuevas formas de llevar el conocimiento científico a todos los públicos, rompiendo barreras de lenguaje y accesibilidad. Desde la televisión con su programa en La 2, El cazador de cerebros, hasta sus libros y participaciones en el A Vivir que son dos días, su enfoque ha impactado considerablemente la comunicación científica en España desde hace más de veinte años. Hoy se ha pasado por La Ventana para hablar sobre este premio, la desinformación y los retos científicos del futuro.
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Antes de ser uno de los rostros más visibles de la divulgación científica, Estupinyà era un joven investigador realizando un doctorado en Genética. Sin embargo, un correo electrónico dirigido a Eduard Punset cambió el rumbo de su carrera. Fanático del icónico programa Redes, Pere se ofreció a colaborar gratis, un gesto que le abrió las puertas al mundo de la comunicación científica. De hecho, dedicará parte de su discurso al recoger el premio a recordar al fallecido divulgador y a subrayar la importancia de invertir en cultura científica.
La brecha entre la ciencia y la sociedad
Estupinyà ha señalado con preocupación la enorme brecha que existe entre los descubrimientos científicos y el conocimiento del público general. "La gente no sabe lo que no sabe. Cuando te cuentan algo, como le ha pasado a Mel Gibson, uno tiene un subidón de entender algo nuevo. Lo quieres explicar, y lo haces como si supieras mucho. Después te vas dando cuenta de que sabes menos de lo que crees y baja esa confianza", ha dicho.
También ha hecho hincapié en el auge de la desinformación en cuanto a la información científica en la sociedad actual. "Quienes evalúan a los científicos son la gente que sabe, no los tuiteros. En el Covid pasó con las mascarillas. Alguien lo politiza, luego lo polariza y se convierte en un tema de confrontación. Entonces lo que importa no es lo que diga el dato, sino la persona que lo ha dicho", ha dicho Estupinyà, que propone que no solo se regule la información falsa, sino que también se investiguen las razones detrás de su propagación y se refuercen las herramientas de verificación.
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Cambio climático y energías renovables
En cuanto a la crisis climática, término que propuso The Guardian, su postura es realista. "No tenemos indicios de que el cambio climático vaya a mejorar. No lo vamos a frenar. Vamos a tener que acostumbrarnos. En función de lo que hagamos, la curva de calentamiento será más empinada o menos. Hay un fenómeno de la geoingeniería mediante el que podemos inyectar polvos de la atmósfera para paliar la radiación solar. Si ahora mismo dejáramos de emitir, la atmósfera tardaría varios años en recuperarse", ha afirmado el bioquímico.
Ante las teorías negacionistas, Estupinyà ha sido tajante: "Si miras los registros históricos, el clima siempre ha ido cambiando, claro, pero el ritmo era mucho más lento. Nos parece poco unas décimas cada año, pero ese ritmo desde niveles preindustriales es dramático".
También ha explicado el fenómeno de la fusión nuclear y sus múltiples aristas. "Es lo que pasa en el centro de las estrellas. Los átomos de H por la presión se fusionan, produciendo helio. Ahí se libera mucha energía, una fuente casi inagotable de energía. Se están construyendo reactores de fusión que por sus propiedades magnéticas logran generar esa energía. Se ha puesto mucho dinero público en países como EEUU para empresas y universidades que están intentando hacer esta fusión nuclear. Si ocurre, la energía pasará a ser abundante, con todo lo que eso conlleva", ha apostillado Estupinyà.
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Álvaro García-Dotor
Periodista cultural. Redactor en La Ventana.