Resumen del FC Barcelona 5-1 Real Betis: escucha la narración de los goles de Lluìs Flaquer en 'Carrusel Deportivo'

El FC Barcelona suma y sigue tras levantar la Supercopa y mantiene la buena dinámica de una semana de ensueño, goleando al Betis para meterse directamente en los cuartos de final de la Copa del Rey (5-1). Los de Flick llegaron a anotar dos goles más, anulados ambos por fuera de juego, en lo que podría haber sido un auténtico baño de fútbol para el equipo sevillano. Gavi abrió el marcador apenas en el minuto 3, Koundé amplió distancias en el 27' gracias a un tremendo pase de Lamine y Raphinha, de nuevo asistido por la perla de la Masia, culminaba la goleada.

Apenas se había cumplido el minuto cuatro de partido cuando Pedri y Dani Olmo entretejieron una jugada entre las líneas béticas, sin que ninguno de los defensas pudiera echarles el guante, para habilitar a un Gavi que superaba a Vietes con su disparo. El sevillano pidió perdón a la afición de su exequipo mientras era rodeado por sus compañeros para celebrar el tanto.

En el 27', Koundé y Lamine se entendían a la perfección en la banda derecha para que el lateral llegase con ventaja al área y encañonara la portería bética con una gran definición. No sería el único gol de Koundé en el partido, porque antes del descanso, la dupla con Lamine regalaba un tanto parecido, pero aún más espectacular. Koundé colocaba su disparo por la escuadra del palo corto, el balón rebotaba en el larguero y acababa dentro. Sin embargo, el fuera de juego semiautomático demostraba que el francés se había adelantado por milímetros y el tanto no subía al marcador.

Ya en la segunda mitad, el VAR volvió a anular otro tanto del FC Barcelona, en este caso de Lamine Yamal, de nuevo por fuera de juego. El '19' no tardaba ni un minuto en redimirse. En la siguiente jugada arrancaba con el balón en la frontal del área, recorría todo el campo con una sola conducción y habilitaba a Raphinha para el tercero. En el 67', Ferrán enganchaba una volea dentro del área para colcar el cuarto en el marcador y, con el Betis rendido, llegó el quinto, de nuevo desde las botas de un Lamine totalmente desatado.